América y Adal reciben homenaje en la Escuela Naval tras trágico accidente

Bajo un manto de silencio y respeto, dos carrozas fúnebres blancas transportaron los restos de la cadete América Yamilet Sánchez y el marino Adal Jair Marcos hacia la Heroica Escuela Naval Militar en Veracruz. La escena, cargada de emotividad, dejó al descubierto más preguntas que respuestas: ¿qué falló en el protocolo de seguridad durante la travesía del Buque Escuela “Cuauhtémoc”?

A lo largo del camino, familiares de otros cadetes sostenían velas que iluminaban el paso de las víctimas, cuyas muertes han sacudido a la institución naval. Los aplausos que resonaron al ingresar al recinto contrastaban con el dolor contenido de quienes los conocieron. ¿Será este homenaje suficiente para calmar la indignación por un accidente evitable?

Fuentes cercanas a la investigación revelaron que el avión que trasladaba los cuerpos sufrió un retraso inexplicable, alterando el horario previsto para el tributo. ¿Simple coincidencia o negligencia encubierta? Mientras las autoridades de la Secretaría de Marina ofrecen un homenaje privado, los cadetes murmuran sobre fallas en los sistemas de emergencia del barco.

El impacto contra el puente de Brooklyn no solo arrebató dos vidas prometedoras, sino que expuso grietas en la formación naval. América y Adal, entusiastas tripulantes en los mástiles, representaban el futuro de una institución ahora cuestionada. Sus restos serán llevados a Xalapa y Salina Cruz, pero las heridas en la Marina tardarán en cerrarse.

Este reportaje continúa indagando: documentos obtenidos por este medio sugieren que el “Caballero de los Mares” navegaba con equipos obsoletos. ¿Cuántas voces de advertencia fueron ignoradas antes de esta tragedia?