La máquina polaca Iga Swiatek no conoce frenos: 26 triunfos consecutivos en Roland Garros, donde ya alzó cuatro trofeos, la llevan a un choque generacional contra Aryna Sabalenka, actual número uno del ranking WTA. Será su primer duelo en París, pero con historial de 5-1 a favor de Swiatek en tierra batida.

Tras barrer 6-1, 7-5 a Svitolina, la tetracampeona rozó el récord de Chris Evert (29 victorias seguidas). “Sabalenka es siempre un desafío”, admitió Swiatek, quien busca reconectar con su mejor versión tras meses irregulares. Su rival, en cambio, llega imparable: sin ceder sets y con mentalidad killer. “Dejaré todo en la pista”, prometió la bielorrusa, ávida por conquistar su primer Grand Slam en arcilla.

Mientras Swiatek domina con precisión quirúrgica, Sabalenka apuesta a potencia bruta. Un contraste de estilos que promete fuego: la última final entre ambas en Madrid fue catalogada por expertos como “partido de década”.

En el cuadro masculino, Carlos Alcaraz avanza como tsunami (solo 5 games cedidos) hacia su duelo con Lorenzo Musetti, quien hizo historia al llevar a Italia a semifinales por primera vez en 52 años. El tenis vive una era de reinvención, donde jóvenes disruptivos como Sinner y Alcaraz comparten cartel con leyendas en construcción como Swiatek.

Este Roland Garros no es solo un torneo: es el termómetro de un deporte que se reinventa con cada generación. Y este jueves, entre gritos de “¡Vamos Iga!” y golpes cruzados que superan los 180 km/h, escribirá otro capítulo épico.