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Espectáculos

Alicia Villarreal revela maltrato e infidelidades de Cruz Martínez

La cantante rompe el silencio sobre el abuso y traición en su matrimonio, mientras reencuentros musicales marcan su regreso a los escenarios.

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Tras años de proyectar una imagen de fortaleza ante los reflectores, Alicia Villarreal confiesa las cicatrices emocionales que dejó su relación con Cruz Martínez, exlíder de Los Kumbia Kings. No fue solo la violencia física lo que la marcó, sino el dolor de descubrir repetidas infidelidades. “En este negocio, aprendes a sonreír mientras sangras por dentro”, comparte con amargura, recordando cómo el escarnio público agravó su sufrimiento.

En febrero pasado, la intérprete de “Te Aprovechas” presentó una denuncia formal ante la Fiscalía Especializada en Feminicidios, un movimiento que describe como “el último recurso de una mujer cansada”. Durante una emotiva entrevista televisiva, detalló cómo el patrón de abuso escaló gradualmente: “Al principio justificas los celos, luego normalizas los gritos, hasta que un día te das cuenta de que estás atrapada en una pesadilla”.

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La artista, conocida como “La Güerita Consentida”, abordó sin tapujos el tema de las infidelidades: “En esta industria, las traiciones duelen doble porque ocurren frente a las cámaras”. Su frase “la mujer siempre sabe” resonó entre sus seguidoras, muchas de las cuales han vivido situaciones similares. “Recibo cientos de mensajes de mujeres que ven en mi historia un reflejo de las suyas”, confiesa.

Pese al dolor, Villarreal demostró su resiliencia durante un exitoso concierto en el Domo Care de la Expo Guadalupe, donde agotó localidades. El evento marcó reencuentros significativos: cantó a dueto con Beto Zapata de Pesado, y compartió escenario con Luis Mario Garza, su excompañero en Límite y antiguo pareja. “La vida da vueltas irónicas”, reflexionó sobre este último encuentro, recordando cómo su romance terminó abruptamente cuando Garza fue expulsado de la agrupación.

Entre lágrimas y aplausos, Alicia encontró consuelo en el apoyo de sus hijos y en la música. “El escenario es mi terapia”, admitió mientras prepara nuevas batallas legales. Su historia se ha convertido en un símbolo para muchas mujeres que enfrentan violencia doméstica, demostrando que incluso las figuras públicas más admiradas pueden sufrir en silencio.

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El concierto, que se extendió por casi tres horas, incluyó momentos emotivos cuando su hija Melanie la acompañó desde primera fila. “Ellos son mi razón para seguir luchando”, afirmó la cantante, quien ahora enfrenta el desafío de equilibrar su proceso legal con su carrera artística y el cuidado de su familia.

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