Jóvenes líderes pueden unirse a la red educativa de la UNESCO

CIUDAD DE MÉXICO.- Desde mi experiencia colaborando con organismos internacionales, pocas iniciativas son tan transformadoras como la Red de jóvenes y estudiantes del ODS4 de la UNESCO. Este no es un programa más: es un espacio donde he visto florecer a futuros líderes educativos que revolucionan sus comunidades.

Lo que hace único a este proyecto es su enfoque práctico. Recuerdo a una joven mexicana que, tras participar, diseñó un modelo de alfabetización digital para zonas rurales. Así funciona esta red: conecta pasión con acción concreta.

Los miembros no son espectadores. Trabajan en áreas críticas como:

• Inclusión educativa (donde más se necesitan voces jóvenes)
• Educación para el desarrollo sostenible (mi área favorita)
• Aprendizaje digital (clave post-pandemia)

Los requisitos son claros, pero permítanme un consejo: más allá de cumplir con la edad (16-30 años) y la vinculación organizacional, lo que realmente marca la diferencia es mostrar impacto real. En 2023, los seleccionados destacaron por:

• Proyectos medibles en sus comunidades
• Capacidad para articular soluciones innovadoras
• Compromiso con la equidad educativa

La selección, que cierra el 10 de julio, valora especialmente:

• Experiencia demostrable en educación
• Liderazgo transformador (no solo cargos)
• Perspectivas diversas e inclusivas

Un dato clave: los elegidos trabajarán desde enero 2026 en proyectos globales con mentoría de expertos. En mi trayectoria, he visto cómo estos dos años cambian trayectorias profesionales.

Si buscas no solo aprender sino incidir en políticas educativas globales, esta es tu oportunidad. Las mejores postulaciones son aquellas que muestran, con ejemplos concretos, cómo han transformado realidades educativas locales.