Líder de Los Zetas condenado a 35 años por narcotráfico en EU

Jaime González Durán, alias El Hummer, fundador y cerebro operativo de la infame organización Los Zetas, recibió una condena histórica de 35 años en prisión por un tribunal estadounidense, marcando un hito en la lucha contra el crimen transnacional.

La sentencia incluye la confiscación de 792 millones de dólares, vinculados a su red de tráfico de estupefacientes, tras comprobarse su participación en el envío masivo de cocaína y marihuana hacia territorio estadounidense. Este golpe financiero desmantela parte de la estructura económica del ahora denominado Cártel del Noreste, designado como grupo terrorista por Washington en febrero de 2025.

Según documentos judiciales, el capo coordinó personalmente la entrada de 450 kilos de cocaína y 90 toneladas de marihuana, empleando tácticas brutales para dominar plazas fronterizas y corromper autoridades. “Su violencia redefinió el narcotráfico“, afirmó Matthew Galeotti del Departamento de Justicia, destacando cómo su red operaba como un ejército irregular con arsenales y tácticas de guerra.

La DEA calificó el fallo como una victoria tras 20 años de investigación: “Ningún capo está fuera de nuestro alcance“, declaró el agente William Kimbell, subrayando que la sentencia envía un mensaje contundente a los cárteles que ven a EU como mercado. González Durán admitió su culpabilidad el 28 de febrero, cerrando un expediente que expone la sofisticación logística y la crueldad de estas organizaciones.

Este caso revela una verdad incómoda: el narcotráfico ya no es solo un delito, sino un fenómeno geopolítico que demanda estrategias globales. ¿Podría esta sentencia inspirar nuevos modelos de cooperación internacional para desarticular redes criminales antes de que escalen a amenazas terroristas? La respuesta definirá el futuro de la seguridad continental.