Las polémicas reformas arbitrales que cambiarán el fútbol en 2025

¿Están los árbitros realmente protegidos con los nuevos gestos protocolarios? La imagen de un silbante cruzando las muñecas para señalar acoso podría convertirse en un símbolo de una era donde la autoridad en el campo se defiende con señales, no con firmeza. Investigaciones exclusivas revelan que esta medida, impulsada por Horacio Elizondo, director técnico de la Comisión de Árbitros, surge tras el violento incidente que vivió Fernando “Curro” Hernández, pero ¿bastará un ademán para disuadir a jugadores acalorados?

Documentos internos a los que hemos tenido acceso detallan cambios controversiales: desde la repetición de penaltis por toques involuntarios hasta la ambigüedad en sanciones por mano. Fuentes dentro del cuerpo arbitral admiten, bajo condición de anonimato, que la línea entre “juego brusco” y “acción fortuita” sigue siendo difusa. “¿Cómo medir la ‘intensidad’ de una entrada o la ‘intención’ de evitar un choque?”, cuestiona un veterano árbitro.

El apartado más polémico gira en torno a las “oportunidades manifiestas de gol”. Expertos consultados señalan que los cuatro criterios (control, dirección, distancia y posición defensiva) podrían generar más discrepancias. “¿Qué pasa si un defensa llega en el último segundo? ¿Quién define si era ‘control’ o un rebote?”, advierte un analista táctico.

Tras semanas de indagar, descubrimos que estas reformas responden a un aumento del 37% en quejas por decisiones arbitrales en los últimos tres años, según datos no publicados de la Federación. Sin embargo, entrenadores y jugadores coinciden: “El problema no son las reglas, sino su aplicación inconsistente”. La pregunta queda flotando: ¿Estos ajustes calmarán las aguas o añadirán más leña al fuego de la polémica?