Exjefe de seguridad de Tabasco huye tras ser vinculado al CJNG

En mi trayectoria cubriendo temas de seguridad, pocos casos ejemplifican tan crudamente la infiltración del crimen organizado en las instituciones como el de Hernán Bermúdez Requena. Este exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco, cuyo nombre aparecía recurrentemente en reportes de inteligencia desde 2022, ha terminado convertido en un fugitivo internacional con alerta roja de Interpol.

Recuerdo cuando, durante una investigación en 2023, agentes de campo me comentaban entre dientes sobre las “coincidencias” entre operativos fallidos y los movimientos de “La Barredora”, célula del CJNG. Hoy, la Fiscalía de Tabasco confirmó lo que muchos sospechábamos: emitió una orden de captura contra Bermúdez el 14 de febrero de 2025 por presunta colusión con este grupo delictivo.

Los detalles de su huida revelan la sofisticación de estas redes. Según el general Miguel Ángel López Martínez, Comandante de la 30ª Zona Militar, Bermúdez escapó desde Mérida con rumbo a Panamá, luego a España, y finalmente a Brasil. Un patrón que he visto antes: funcionarios corruptos suelen elegir destinos sin tratados de extradición inmediatos.

Este caso demuestra que, cuando el crimen organizado corrompe a altos mandos, las consecuencias son sistémicas. No es solo un delincuente más: es alguien que operaba con información privilegiada, contactos institucionales y conocimiento de protocolos de seguridad. Una lección dolorosa para Tabasco y para México.