Domino’s clausurada tras burlarse de los baches en San Luis Potosí

¿Qué ocurre cuando el ingenio publicitario se topa con la frágil autoestima de las autoridades? La sucursal de Domino’s Pizza en San Luis Potosí acaba de escribir un capítulo revelador. En lugar de sumarse al coro de quejas por los baches, la cadena los convirtió en protagonistas de una campaña audaz: “En esta ciudad hay dos cosas seguras: los baches… y una Domino’s en tu mesa”.

Esta provocación creativa, lejos de ser premiada como una solución de pensamiento lateral al problema vial, desencadenó una respuesta draconiana. Las autoridades municipales respondieron con operativos sorpresa que terminaron en la clausura temporal del establecimiento, supuestamente por falta de licencias. ¿Coincidencia estratégica o censura disfrazada de burocracia?

El caso plantea preguntas incómodas: ¿Debe el marketing someterse a la mediocridad institucional? ¿O las marcas tienen derecho a reflejar la realidad urbana, aunque incomode al poder? Mientras ciudades como París transforman baches en intervenciones artísticas, San Luis Potosí opta por tapar el mensajero en lugar de arreglar las calles.

Esta colisión entre libertad creativa y control administrativo podría convertirse en estudio de caso para escuelas de negocios. ¿Fue un error táctico de Domino’s o una brillante estrategia de marketing de controversia que, pese a la clausura, logró posicionamiento global? Las redes sociales ya tienen la respuesta: mientras el municipio borraba anuncios, el mundo compartía la historia.