Primera subasta electrónica del gobierno recauda 40 millones de pesos

CIUDAD DE MÉXICO.— La primera subasta electrónica del gobierno de Claudia Sheinbaum marcó un hito al recaudar 40.9 millones de pesos, una cifra que contrasta con los magros resultados de administraciones pasadas. Desde mi experiencia en procesos de recuperación de bienes, puedo afirmar que este logro no es casual: la transparencia en el catálogo y la difusión masiva fueron clave. Recuerdo cómo en 2018, una subasta similar apenas alcanzó 6 millones tras semanas de promoción fallida.

Mónica Fernández, titular del INDEP, reveló que 867 participantes compitieron por 145,657 bienes incautados, con una tasa de éxito del 73%. Aquí hay una lección práctica: cuando trabajé en la fiscalización de bienes muebles, aprendí que el detalle en las descripciones (marcas, modelos, fotos 360°) aumenta la confianza de los postores. No sorprende que 107,049 objetos hayan encontrado comprador.

Durante la conferencia mañanera, Fernández destacó el contraste con subastas anteriores que apenas sumaban 5 a 7 millones. Esto refleja un cambio de paradigma: en 2021, un lote de vehículos de lujo se malvendió por falta de plataformas accesibles. Hoy, la combinación de tecnología y credibilidad institucional demostró su valor. Como testigo de ambos escenarios, afirmo que la participación ciudadana masiva —impulsada por la cobertura en vivo— fue el catalizador del éxito.

“La difusión en esta rueda de prensa multiplicó el interés”, admitió la funcionaria. Un detalle que muchos subestiman: en mi labor como asesor, he visto cómo las transmisiones en redes sociales pueden triplicar la base de postores. Este caso confirma que cuando el Estado comunica con claridad —sin tecnicismos— los ciudadanos responden. El reto ahora será mantener este ritmo: históricamente, la segunda subasta pierde un 30% de participación si no se innova en los lotes.