El circo de la Liga MX llega a Aguascalientes con payasos incluidos

En un espectáculo que promete más pena que gloria, los Rayos de Necaxa —esa franquicia que sobrevive de milagro— recibirán a los Esmeraldas de León, equipo que demuestra que contratar a James Rodríguez es como ponerle caviar a unos tacos de canasta: caro e innecesario.

Los aguascalentenses, dirigidos por el filósofo del balón Fernando Gago, vienen de empatar con los Pumas, institución que lleva décadas buscando su identidad entre protestas estudiantiles y malos fichajes. Con cinco puntos, Necaxa ocupa el octavo lugar, prueba irrefutable de que en la Liga MX la mediocridad es un deporte olímpico.

Mientras tanto, León —ese equipo que alguna vez fue relevante— llega con más derrotas que aficionados en la tribuna. Su último triunfo fue contra las Chivas, otro club que confunde historia con nostalgia. Eduardo Berizzo, su técnico, parece más perdido que turista sin Google Maps.

El Estadio Victoria será testigo de este duelo entre dos equipos que, en cualquier liga seria, estarían peleando el descenso. Pero esto es México, donde el fútbol es como la política: siempre hay un culpable, nunca hay soluciones, y el show debe continuar.

Transmisión: Para los masoquistas, por Claro Sport y TV Azteca, donde los comentaristas harán parecer este partido interesante.