Embajador de EU revela cambio en estrategia antinarco de México

Embajador de EU revela cambio en estrategia antinarco de México

WASHINGTON DC. ¿Qué impulsó el giro de timón en la estrategia de seguridad nacional de México? Las declaraciones del embajador estadounidense, Ron Johnson, ante la Heritage Foundation y el America First Policy Institute, no son simples cortesías diplomáticas. Revelan una transformación profunda en la relación bilateral y en el enfoque del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum hacia los cárteles de la droga.

Durante su intervención, Johnson, un exmiembro de las Fuerzas Especiales y antiguo funcionario de la CIA, no dudó en calificar la nueva postura como un “cambio audaz”. Pero, ¿es este cambio tan radical como lo pinta? Nuestra investigación indaga más allá del discurso oficial.

La evidencia más contundente que presentó el embajador fue la transferencia de 55 capos del narcotráfico a custodia estadounidense, un hecho que calificó como “sin precedentes”. Sin embargo, surge una pregunta incómoda: ¿por qué estas entregas se realizaron fuera del marco del tratado de extradición bilateral? Este detalle, aparentemente técnico, sugiere la existencia de acuerdos paralelos y canales de cooperación opacos que merecen ser escrutados.

Johnson defendió con vehemencia la decisión de la administración Trump de designar a seis cárteles mexicanos como Organizaciones Terroristas Extranjeras. “Lo que los cárteles hacen a la población local es, por definición, terrorismo”, afirmó. Esta postura choca frontalmente con la narrativa del gobierno mexicano anterior, que evitaba sistemáticamente este tipo de caracterizaciones. ¿Está México alineándose ahora con la visión estratégica de Washington?

Este aparente nuevo rumbo parece confirmarse con el más reciente análisis del Servicio de Investigación del Capitolio (CRS), publicado en agosto. Apenas la semana pasada, el presidente Trump certificó los esfuerzos antidrogas de Sheinbaum, a pesar de ubicar a México como una ruta crítica para el narcotráfico. Los datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) muestran una caída del 50% en el decomiso de fentanilo en junio de 2025 comparado con el año anterior. ¿Es esto resultado de una estrategia más efectiva o simplemente un cambio táctico de los cárteles?

La conclusión que se impone es clara: estamos ante un reacomodo geopolítico significativo. La “nueva era de cooperación” que anuncia Johnson implica una convergencia estratégica que deja atrás la política de “abrazos, no balazos”. Las implicaciones para la soberanía nacional y la seguridad de los mexicanos son profundas y requieren un periodismo vigilante. La verdadera pregunta que queda por responder es: ¿a qué costo se está forjando esta nueva alianza?

ANUNCIATE CON NOSOTROS

Scroll al inicio