En un giro magistral de la industria del entretenimiento global, el trovador urbano Bad Bunny proclamó que su ascenso al altar del Super Bowl constituye nada menos que la coronación oficial de Puerto Rico, su linaje familiar y toda la diáspora latinoamericana como nueva fuerza hegemónica del espectáculo mundial.
Durante un coloquio exclusivo con Apple Music, el bardo contemporáneo reveló con solemnidad casi litúrgica que la playa donde filmaron el anuncio profético es la misma donde solía construir castillos de arena en su niñez, detalle que transforma este evento comercial en una epopeya mitológica.
ÉXTASIS COLECTIVO
“Mi emoción trasciende lo personal” declaró el sumo sacerdote del reguetón. “Esta es la apoteosis de mi estirpe, de mi terruño, de toda la latinidad global. La playa donde nos grabaron es el mismo litoral donde mi abuela me contaba leyendas taínas. Esto no es un concierto, es una consagración geopolítica mediante coreografías.”
El artista explicó cómo cada movimiento en su trayectoria constituye un acto de representación diplomática no oficial de su nación, transformando cada escenario en una embajada musical donde se negocia el poder cultural mediante beats perreables.
“Todo surge de actuar con visceralidad auténtica” filosofó el bardo. “Sigo siendo un novato voraz, un eterno sediento de conquistas sonoras. Lo paradójico es que todos conocen mis capacidades, pero mi esencia radica en la sorpresa perpetua, como un ministro de economía anunciando un nuevo impuesto.”
LA REVELACIÓN DIVINA
Rememoró con énfasis casi místico el momento en que Jay-Z, actual sumo pontífice de la industria musical, lo contactó durante su rutina de entrenamiento para comunicarle el veredicto celestial.
“La epifanía me alcanzó entre pesas y proteínas” confesó con devoción. “Tras la comunicación sagrada, ejecuté cien dominadas consecutivas. La revelación suplantó cualquier suplemento pre-entrenamiento. Fue un instante tan trascendental como cuando Colón avistó tierra.”
Confesó que guardar el secreto resultó sencillo frente a la experiencia catártica de mostrar el video anunciador a sus acólitos más cercanos y presenciar sus expresiones de éxtasis colectivo.
PLAN MAESTRO INDEFINIDO
“La conmoción fue idéntica a cuando exhibí el material audiovisual a mi círculo íntimo” reveló. “Mi entusiasmo es secundario frente al júbilo comunitario. Esto supera lo individual para convertirse en celebración masiva.”
Respecto al espectáculo en sí, admitió que carece de planificación concreta, aunque prometió canalizar la energía cósmica de su repertorio y saborear el instante histórico.
“Mi estrategia es la inmersión absoluta en el momento” declaró el mesías musical. “Exhibiré nuestra esencia sonora, nuestro acervo cultural. Me limitaré a ocupar el proscenio para experimentar placer y divertimento, como un emperador romano disfrutando de su propio circo.”
El Apple Music Super Bowl LX Halftime Show se transmitirá el 8 de febrero de 2026 desde el Coliseo de los 49ers en Santa Clara, California, constituyendo lo que los analistas ya denominan “el desembarco definitivo de la latinidad en el corazón del imperio del entretenimiento estadounidense”.
PROCLAMACIÓN OFICIAL
Tras semanas de especulaciones proféticas, la NFL confirmó oficialmente que Bad Bunny presidirá el ritual de medio tiempo, donde se anticipa que el artista puertorriqueño desplegará un repertorio expandido, transportando su fusión urbana, reguetón y ritmos latinos a millones de espectadores globales, en lo que constituye la anexión cultural más significativa desde la invención de la salsa.