Matamoros, Tamaulipas.— El incremento en los costos asociados a la formalidad laboral está generando efectos adversos en el comercio local, advirtió Lauro Peña, empresario abarrotero en Matamoros, quien señaló que cada vez más pequeños negocios enfrentan dificultades para mantenerse dentro del esquema formal.
El empresario explicó que, si bien los ajustes salariales buscan beneficiar al trabajador, en la práctica vienen acompañados de incrementos en primas, cuotas y aportaciones obligatorias que elevan de forma considerable los gastos de los patrones. Como ejemplo, detalló que solo en pagos de seguro social algunos negocios han llegado a cubrir entre 20 y 30 mil pesos mensuales, una carga difícil de sostener para comercios de bajo margen.
Peña indicó que esta situación ha llevado a algunos empresarios a optar por salirse de la formalidad o reducir su plantilla, al considerar que los costos ya no son proporcionales a los beneficios. A ello se suma, dijo, la saturación del sistema de salud, donde la falta de medicamentos, la escasez de consultas y la limitada disponibilidad de personal médico reducen el impacto positivo de las aportaciones.
De acuerdo con cifras del sector comercio, hasta el 35% de los pequeños establecimientos en ciudades fronterizas reportan complicaciones para cubrir cuotas laborales completas, especialmente en contextos de baja venta.
El empresario subrayó que, mientras más personas se incorporan al sistema, la inversión pública en el sector salud no crece al mismo ritmo, lo que agrava la percepción de desequilibrio entre lo que se aporta y lo que se recibe. Finalmente, llamó a revisar el modelo actual para evitar que la presión económica siga debilitando al comercio local, uno de los principales generadores de empleo en Matamoros.














