Un caso médico extraordinario sorprendió a la comunidad de salud en Estados Unidos luego de que Suze López, una enfermera de 41 años residente de Bakersfield, descubriera que cursaba un embarazo ectópico abdominal avanzado, con un bebé de casi ocho meses de gestación desarrollado fuera del útero.
La mujer, que llevaba 17 años intentando concebir un segundo hijo, acudió al hospital por presión arterial elevada y molestias abdominales persistentes. Previamente, una masa detectada cerca del hígado había sido confundida con un tumor de aproximadamente 10 kilogramos. Sin embargo, una prueba de embarazo de rutina, realizada antes de una intervención quirúrgica, reveló la verdadera causa.
El diagnóstico fue confirmado en el Cedars-Sinai Medical Center, en Los Ángeles, donde estudios de imagen mostraron un embarazo ectópico abdominal extremadamente raro: el útero estaba vacío y el feto se encontraba alojado en un pequeño espacio cercano al hígado, detrás de un quiste ovárico benigno de más de nueve kilogramos.
El procedimiento implicó altísimo riesgo para la madre y el bebé, debido a la posibilidad de hemorragias severas y muerte fetal, ya que la placenta no puede desarrollarse con seguridad fuera del útero. Ante la complejidad del caso, se conformó un equipo multidisciplinario de alrededor de 30 especialistas, incluyendo ginecólogos oncólogos, expertos en medicina materno-fetal, anestesiólogos y personal de enfermería.
La intervención fue encabezada por el doctor John Ozimek, mientras que el quiste fue extirpado por el ginecólogo oncólogo Michael Manuel, lo que permitió la extracción segura del bebé, quien fue trasladado de inmediato a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN).
El recién nacido, llamado Ryu Jesse, llegó al mundo con un peso de 3.628 kilogramos y en condiciones estables. Sus padres, Suze y Andrew López, calificaron el acontecimiento como un milagro, al considerar que es la respuesta a años de oración. El segundo nombre del bebé, Jesse, significa “regalo de Dios”.
Especialistas subrayaron que un embarazo ectópico abdominal que logra desarrollarse hasta casi el término es “casi inaudito”, por lo que el caso ya es considerado un referente médico y un ejemplo de coordinación clínica de alto nivel, además de un testimonio de esperanza para miles de familias que enfrentan dificultades para concebir.



















