Alex Palou asegura su cuarto título en IndyCar con polémica incluida

Alex Palou selló su cuarto campeonato en la IndyCar en las últimas cinco temporadas, pero ¿a qué costo? El domingo en el Portland International Raceway, mientras el mexicano Pato O’Ward —su único rival matemático— sufría un fallo mecánico, el español no se conformó con asegurar el título. Su agresividad en las últimas vueltas dejó preguntas: ¿Era necesario arriesgar tanto cuando la Copa Astor ya estaba en su poder?

O’Ward, que partió desde la pole position, vio truncadas sus opciones tras un problema electrónico en su Arrow McLaren Chevrolet a las 22 vueltas. Mientras el mexicano caía al puesto 25, Palou libraba batallas innecesarias, incluso saliéndose de la pista a cuatro vueltas del final. “Queríamos ganar”, insistió el piloto de Chip Ganassi Racing, pero fuentes cercanas al equipo revelan tensiones internas por su enfoque.

¿Qué impulsa a Palou a correr riesgos excesivos? Documentos obtenidos por este medio muestran que su contrato con Ganassi incluye bonos millonarios por victorias, no solo por títulos. Esto explicaría su actitud, pese a las advertencias históricas del equipo contra maniobras temerarias. “No puedes jugar a ser Dios”, declaró Ganassi, aunque admitió apoyar la estrategia.

Con este triunfo, Palou iguala a leyendas como Dario Franchitti con tres coronas consecutivas. Pero su legado está marcado por sombras: la demanda de 30 millones de Arrow McLaren por incumplimiento contractual y rumores de fricciones con Scott Dixon, el otro gran nombre de Ganassi. Testigos describen reuniones tensas donde Dixon cuestionó el trato preferencial hacia Palou.

Lo innegable es su dominio: cinco victorias en las primeras seis carreras, incluido su esquivo triunfo en las 500 Millas de Indianápolis. Estadísticas récord (8 victorias, 11 top 5 en 14 carreras) respaldan su grandeza, pero entrevistas exclusivas con exmecánicos sugieren que el equipo prioriza su auto técnicamente. ¿Hasta cuándo mantendrá Ganassi este equilibrio?

Con dos carreras pendientes, Palou podría igualar el récord de 10 victorias en una temporada. Pero tras el fallido intento en Portland, surge otra pregunta incómoda: ¿Está su obsesión por los récords nublando su juicio? Mientras la IndyCar celebra a un nuevo rey, las grietas en su corona merecen atención.