Este sábado, Saúl “Canelo” Álvarez fue derrotado por decisión unánime ante Terence Crawford, perdiendo así el codiciado título de monarca indiscutible de la categoría supermediana.
La derrota del pugilista avivó de inmediato las críticas de sus detractores, entre los que destaca el comentarista David Faitelson, conocido por su histórica rivalidad dialéctica con el astro tapatío.
A través de sus redes sociales, el presentador de Televisa asestó un duro golpe: “¿Riesgos? Subir a un contrincante dos divisiones y embolsar una bolsa millonaria superior a los 100 millones de dólares. Álvarez siempre fue un pugilista limitado con un enorme aparato de marketing detrás. El mito se desvanece”.
El triunfo de Crawford es histórico: al escalar dos categorías de peso, se consagró como el primer boxeador en la era de los cuatro cinturones en unificar campeonatos en tres divisiones distintas, redefiniendo los límites del deporte.
Frente a las críticas, Canelo mantuvo su postura: “Una derrota no me define”. El campeón asegura sentirse con fuerza y se enorgullece del legado imborrable que ya ha forjado dentro del cuadrilátero.
El futuro inmediato del ídolo mexicano es una incógnita. La agenda de su próxima pecha y el rival elegido para resarcir su imagen tras la sorpresiva caída en Las Vegas aún están por definirse.
