Palou está a un paso de su cuarto título en IndyCar

En el circo de los caballos de acero, donde los pilotos hacen malabares con las leyes de la física y el presupuesto de sus patrocinadores, Alex Palou se prepara para coronarse como el nuevo emperador de la IndyCar. Mientras tanto, Patricio O’Ward, el valiente gladiador mexicano, intenta evitar que el español celebre su victoria antes de tiempo, aunque las matemáticas —esa cruel tirana— parecen estar del lado del europeo.

El cuarto puesto de O’Ward en Canadá no fue exactamente el golpe de efecto que necesitaba para mantener viva la llama del drama. Palou, en cambio, cruzó la meta como si el asfalto fuera una alfombra roja diseñada exclusivamente para él, ampliando su ventaja a 121 puntos, una diferencia que no se veía desde que los teléfonos plegables eran considerados tecnología futurista.

En este reino de la velocidad, donde los puntos se reparten como si fueran caramelos en una piñata (50 por ganar, dos por liderar más vueltas, uno por la pole y otro por ser el primero en alguna prueba), Palou solo necesita mantener a O’Ward a 108 puntos de distancia para que la corona sea suya. O incluso menos, porque, ¿quién necesita suspense cuando puedes tener un desenlace anticipado?

Después de Portland, solo quedarán dos paradas en este viaje: Milwaukee y Nashville, donde los motores rugirán, los neumáticos chirriarán y los aficionados se preguntarán si alguien podrá evitar lo inevitable.

Horarios para ver el (posible) entierro de las esperanzas de O’Ward:

• Fecha: Domingo 10 de agosto (día perfecto para una coronación)
• Hora: 13:00 horas (justo después del almuerzo, para digerir la derrota)
• Dónde verlo: ESPN / Disney+ (porque hasta los sueños rotos son entretenimiento)

Así que prepárense, porque mientras Palou ajusta su corona imaginaria, O’Ward intentará lo imposible: convertir una desventaja histórica en un milagro digno de un guion de Hollywood. Spoiler: las matemáticas no suelen ser muy cinematográficas.