Tigres y Toluca empatan en semifinal y definición se jugará en el Nemesio Diez

En un partido lleno de emociones, Tigres y Toluca dejaron el marcador 1-1 en la Semifinal de ida, dejando la serie abierta para la vuelta en el temido Nemesio Diez. Desde mis años cubriendo la Liga MX, he visto cómo estos duelos se deciden en detalles: un error defensivo, una atajada clave o un gol inesperado. Hoy, Nahuel Guzmán volvió a demostrar por qué es uno de los mejores arqueros del fútbol mexicano, con al menos tres intervenciones clave que salvaron a su equipo.

El partido comenzó con Toluca presionando alto, una táctica que me recordó a los equipos de Ricardo La Volpe: intensidad desde el primer minuto. Marcel Ruiz y Paulinho generaron peligro, pero fue Tigres quien abrió el marcador contra el flujo del juego. Ozziel Herrera, un jugador al que he seguido desde su etapa en Atlas, demostró su velocidad y colocó un pase perfecto para que Nicolás Ibáñez rompiera su sequía goleadora. Sin embargo, como suele pasar en estos partidos, la ventaja duró poco.

La experiencia me ha enseñado que en semifinales, los equipos no se rinden. Toluca, liderado por Alexis Vega, encontró el empate antes del descanso gracias a un cabezazo de Paulinho. En el segundo tiempo, los Diablos Rojos buscaron el gol de la victoria, pero Nahuel volvió a ser una muralla. Antonio Mohamed intentó cambios, pero el marcador no se movió. Ahora, Tigres enfrenta un reto monumental: ganar en el infierno del Nemesio Diez, algo que pocos equipos logran en instancias decisivas.

La vuelta promete ser épica. Toluca avanza con otro empate, pero en fútbol, como bien sabemos, nada está escrito hasta el silbatazo final.