Un método vanguardista para reactivar al Chicharito
Jorge Mendoza, una figura disruptiva que fusiona el alto rendimiento como piloto internacional con la instrucción deportiva de élite, ha puesto su mirada en el proyecto de Javier “Chicharito” Hernández. Su objetivo es aplicar metodologías de vanguardia para que el delantero recupere su máximo potencial atlético.
Mendoza, un competidor multidisciplinario que ha hecho historia en el deporte motor y fue campeón de Tae Kwon Do, entrenó con discípulos directos de Bruce Lee, como Joe Lewis, pionero global del Kick-Boxing. Esta experiencia le permitió desarrollar un sistema integral físico y cognitivo, probado con éxito incluso con un equipo de fútbol para personas sordas en Pharr, Texas, en 2019.
La filosofía de alto rendimiento aplicada
En 2019, Mendoza aceptó el reto de transformar a ese equipo de fútbol, que estaba al borde de la deserción por malos resultados. Actuando como preparador físico, estratega mental y jugador, se comprometió a llevarlos al título. Revolucionó la dinámica del colectivo y, con los mismos integrantes, optimizó el rendimiento individual para alcanzar la meta.
Esta hazaña es el resultado de su fórmula patentada, Speed-Health, un concepto que sintetiza décadas de experiencia en la frontera del desempeño humano.
Speed-Health: Más que un entrenamiento, una reprogramación
Jorge, especialista en medicina cuántica y ciencia del deporte, domina la optimización de las herramientas de un atleta. “Chicharito no está en silla de ruedas. Su desafío es mental; requiere un mantenimiento de alto octanaje, similar al de un auto de carreras. Su organismo necesita una recuperación específica para que cognición y cuerpo operen en sincronía total”, explicó Mendoza.
A sus 63 años, compite en equipos de fútbol con jóvenes de 18, una prueba viviente de su metodología. Sabe que trabajar con “El Chicharito” representa un nuevo y fascinante desafío. “Me encantaría colaborar y asistirle en su proceso”, afirmó.
Legado y mentalidad de un pionero
La pasión de Jorge por el fútbol es de cuna, llegando a jugar en el mítico Estadio Azteca junto a los hijos de ejecutivos históricos como Guillermo Cañedo y José Antonio Roca. Compitió para la Universidad de St Mary´s en San Antonio mientras simultáneamente se dedicaba al Karting y al Tae Kwon Do, forjando la mentalidad adaptable y resiliente de un atleta del futuro.
