Alejandra Guzmán revela su lucha contra la hipertensión y cirugías

En un giro digno de una telenovela médica, Alejandra Guzmán, la eterna rebelde del rock, ha añadido otro capítulo a su épica batalla contra el sistema de salud. La artista, quien parece coleccionar diagnósticos como trofeos, ahora suma la hipertensión a su lista de padecimientos, junto al ya conocido drama de los biopolímeros y su prótesis de titanio. ¿Será que su cuerpo está en huelga después de décadas de ritmo desenfrenado?

La diva del escenario, quien alguna vez desafió las leyes de la gravedad con sus piruetas, ahora enfrenta una realidad menos glamorosa: líquido sinovial extraído como si fuera combustible de un auto viejo. “Me quitaron muchas cositas”, confesó con la misma naturalidad con la que antes anunciaba giras mundiales. ¡Qué tiempos aquellos cuando lo más preocupante era si su próxima canción sería un éxito!

Lo más irónico es que, mientras los mortales comunes sufrimos por subirnos a una bicicleta estática, la Guzmán sigue empeñada en volver a los escenarios “con la energía que merecen sus fans”. ¿Acaso no se ha enterado de que el reposo existe? Pero no, ella prefiere convertir su recuperación en un espectáculo, porque ¿qué sería de la rockera sin su público? Eso sí, uno no puede evitar preguntarse: ¿cuántas prótesis más aguantará su cuerpo antes de convertirse en un cyborg del rock?

Y mientras los médicos le recomiendan calma, ella sigue acumulando cirugías como si fueran giras. ¿Será que su próximo álbum se titulará “Historias de quirófano”? Por ahora, solo nos queda esperar que su presión arterial no suba tanto como su pasión por el escenario.