Alejandro Sanz defiende su verdad ante acusaciones y reafirma su compromiso

Alejandro Sanz ha alzado la voz con un mensaje contundente en defensa de la verdad, tras la polémica que lo vincula con una supuesta relación íntima con una seguidora. A través de su canal de WhatsApp, el icónico cantante de éxitos como “Amiga Mía” y “Corazón Partío” agradeció el apoyo de sus fans y rechazó las acusaciones con firmeza.

“Nunca les fallaré, no me doblegaré ante abusos ni permitiré que nos falten al respeto. Somos lo que elegimos ser, pero nos defendemos unidos porque tenemos principios. Algunos retroceden, otros avanzan, pero no seremos ingenuos. No hay mejor manera de celebrar nuestro vínculo que defendiendo la verdad ante todo”, escribió el artista.

El músico, de 56 años, reconoció sus imperfecciones pero negó rotundamente ser un “miserable”, subrayando que su vida gira en torno a la música y su legado artístico.

Vulnerabilidad y fortaleza

“Sí, me avergüenza que expongan mi privacidad, pero no daré ni un paso atrás. He enfrentado momentos oscuros de fragilidad, pero nada empañará la belleza de lo construido. Los quiero, soy suyo, y no podría estar más feliz. Ningún acto de maldad podrá manchar nuestra historia”, añadió Sanz.

Este mensaje surge después de que Ivet Playà, en una entrevista con el programa ¡De Viernes!, insinuara que el cantante se negó a participar en un negocio familiar que ella le propuso, aunque negó haberlo presionado económicamente. “Él me ofreció ayuda, pero luego se aprovechó de su posición”, afirmó, expresando decepción por la reacción pública del artista.

“Los ataques financieros son una cortina de humo para ocultar lo relevante. Estoy cansada de morderme la lengua, pero confío en que pronto se aclare todo”, declaró Playà.

Silencio elocuente

Mientras tanto, Candela Márquez, pareja de Sanz, reapareció en Madrid evitando comentarios. Al ser abordada en el aeropuerto, solo afirmó estar “muy bien” sin abordar la polémica ni posibles acciones legales del cantante.

En un mundo donde las narrativas se distorsionan en segundos, Sanz plantea una reflexión disruptiva: ¿qué define la verdad en la era digital? Su postura no solo defiende su reputación, sino que desafía la cultura del escándalo, invitando a sus seguidores a priorizar la autenticidad sobre el ruido mediático.