El Regreso a las Raíces: Más Allá del Reality
Tras mi paso por los reality shows, una experiencia formativa sin duda, Alexis Ayala retorna a su esencia: el arte dramático. Lo digo con la convicción de quien ha visto muchos ciclos en esta industria: no hay como el desafío de construir un personaje desde el guion. En esta ocasión, me enfrento a Aurelio, un antagonista cuyo veneno no es la maldad caricaturesca, sino los patrones machistas enquistados en el seno familiar, algo que, lamentablemente, he observado en múltiples formas a lo largo de mi carrera.
La Anatomía de un Villano Cotidiano
En “Somos Familia“, proyecto liderado por Ignacio Sada, comparto escena con talentos como Oka Giner y David Zepeda. La novela promete un giro con escenas de motocross, un detalle logístico que ya nos tiene entrenando rigurosamente, pues el productor descartó el uso de dobles de riesgo. Una lección que aprendí hace años: cuando el actor realiza sus propias secuencias de acción, la veracidad en pantalla es palpable.
Pero el verdadero motor no son las motos, sino la psicología del personaje. Aurelio es un “macho terrible“, frustrado, que subestima a las mujeres y limita a sus hijas, interpretadas por Oka Giner y Lizzy Martínez. He interpretado villanos antes, pero la clave con Aurelio, y esto es un insight que solo da la experiencia, es encontrar la humanidad detrás del error. No se trata de un monstruo, sino de un hombre que no supo realizarse y proyecta su fracaso sobre su familia. Su acción inicial es la chispa que detonará la búsqueda del personaje de Verónica y toda la trama.
Adaptar con Oficio: La Sabiduría Detrás del Proyecto
Esta producción es una adaptación de una obra argentina de 2014, con el valioso respaldo de ser una creación original de Enrique Estebanez, el reconocido autor de “Amores verdaderos“. En este negocio, he aprendido que un buen texto es el cimiento de todo. Como comenta Nacho Sada, no es un proyecto pretencioso con mensajes grandilocuentes; su objetivo es claro y honesto: entretener a la familia y ofrecer un respiro. A veces, en la búsqueda de la profundidad, se olvida el poder catártico del simple entretenimiento bien hecho, y eso también es un arte.
El estreno está pactado para el 26 de mayo en horario estelar. Más que un simple regreso, lo veo como una oportunidad para, desde la ficción, reflejar y cuestionar dinámicas sociales que aún persisten. Al final, el mayor reto no fue aprender a manejar una motocicleta, sino darle vida a una frustración tan real que, estoy seguro, resonará en muchos hogares.
