El enigmático regreso de un grupo que nunca se fue

En un alarde de audacia que redefine el concepto de “realidad alternativa”, la cantante Paty Sirvent ha proclamado desde su atalaya la resurrección de una entidad musical que, para el común de los mortales, nunca llegó a extinguirse. Con la solemnidad de un estadista anunciando una nueva era, Sirvent declaró que el grupo Jeans, aquel que integró en sus albores con Litzy, Angie Taddei y Tábatha Vizuet, se alista para un magno regreso.

La noticia, como es lógico, ha sumido al universo del espectáculo en un estado de perplejidad cósmica, pues desde hace más de una década ronda por los escenarios un espectro llamado JNS, un concepto espectral creado por varias de sus excolegas. Este doble etéreo ha estado realizando giras y consumiendo oxígeno mediático, lo que plantea una fascinante disyuntiva metafísica: ¿cuál de las dos formaciones es la auténtica? ¿La original fosilizada en la nostalgia o la actual que nunca cesó?

Mientras una minoría de incautos ha mostrado un júbilo desmedido, la mayoría de la plebe digital se encuentra sumida en un mar de confusión, preguntándose si acaso han vivido en una simulación durante los últimos diez años. El silencio sepulcral del conjunto JNS ante el anuncio de Sirvent no hace más que alimentar la teoría de que nos hallamos ante un cisma en el mundo del pop, una guerra fría donde las armas son los comunicados de prensa y el botín, el derecho a encarnar un legado que, al parecer, es lo suficientemente valioso como para justificar esta comedia de equívocos. Una alegoría perfecta de nuestra época, donde la versión oficial compite con los hechos obstinados, y la verdad es la primera baja en la batalla por la relevancia.

ANUNCIATE CON NOSOTROS

Scroll al inicio