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La guerra digital de los Aguilar expone una fractura familiar

La tensión en la dinastía Aguilar estalla en la esfera digital

El conflicto interno de la famosa dinastía Aguilar se hizo viral cuando Emiliano, el primogénito de Pepe Aguilar, utilizó sus plataformas digitales para lanzar comentarios velados contra el icónico intérprete y sus medio hermanos.

En el epicentro de esta disputa pública, Marcela Rubiales, hermana de Pepe, intervino para defenderlo con un mensaje directo dirigido al joven artista urbano.

Fue en el perfil de Instagram de Emiliano donde Marcela expresó su descontento con sus actitudes y declaraciones. Le instó a dejar de malgastar su energía en críticas y a concentrarse en su vida personal: “Emiliano, ya párale. Vive tu vida, preocúpate por tu hija y hazla feliz y deja la vida de los demás, acuérdate del karma”, escribió.

La hija de Flor Silvestre enfatizó que los comentarios contra su padre no solo lo afectan a él, sino también la percepción que tienen los seguidores: “Mientras tú sigas hablando de él, a él le van a preguntar cosas de ti, deja de hablar de él”, advirtió. Además, le recomendó que se concentrara en su propia identidad.

Rubiales reconoció que, si bien la vida de las figuras públicas siempre está bajo escrutinio, esto no justifica ventilar asuntos personales. Por ello, exigió respeto hacia la figura de Pepe Aguilar.

El detonante de esta situación fueron las declaraciones de Pepe Aguilar, donde afirmó que no vio crecer a su hijo mayor, ya que Carmen Treviño, madre de Emiliano, se lo llevó sin ofrecer explicaciones. El joven salió en defensa de ella y compartió comentarios negativos que había recibido de su familia materna.

Posteriormente, en la cuenta de “Gordo”, el pug de Pepe Aguilar, se subieron stories de los viajes del canino.

Emiliano interpretó esto como una provocación, al recordar que durante su niñez no tuvo acceso a los mismos privilegios y lujos que sus medio hermanos, Ángela, Aneliz y Leonardo. Una de las instantáneas mostraba al perro en una locación similar a la que él suele usar en sus contenidos, frente a una alberca, acompañado de la frase “Les tengo una pregunta”, con la que acostumbra iniciar sus grabaciones.

Para gran parte de su comunidad digital, se trató de una burla, por lo que la publicación finalmente fue eliminada.

Como réplica, Emiliano contraatacó con otra publicación en la que superpuso el rostro del perro sobre una fotografía grupal de los Aguilar. También insinuó que Ángela había sido víctima de violencia por parte de una expareja.

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