Matute convierte los éxitos ochenteros en un espectáculo global

En un alarde de resurrección musical, Matute aterriza en el Mission Event Center (Texas) para inaugurar el templo del espectáculo con su Disco Stereo Tour, donde prometen convertir el recinto en una máquina del tiempo hacia 1985. No contentos con saquear los éxitos ajenos, ahora los exportan como si fueran suyos en una gira que recorre EE.UU., España y pronto Brasil, porque ¿qué mejor que venderle a los sudamericanos su propia memoria musical?

De la bohemia barrial al circo multinacional

Lo que empezó como un hobby para evadir impuestos reinterpretando canciones ajenas en bares de mala muerte, hoy es un imperio de karaoke profesionalizado. Con 18 años de saqueo cultural (celebrados con pompa en 2025), la banda ahora llena estadios mientras los compositores originales cobran regalías en monedas. Su fórmula es infalible: tomar éxitos ajenos, añadir sintetizadores y venderlos como “homenaje”.

El elenco de este cover de lujo incluye a Jorge D’Alessio (director de orquesta del plagio), Tana Planter (corista de emociones prestadas) y Nacho Izeta (guitarrista de riffs reciclados), entre otros. Juntos demuestran que en la industria musical actual, el talento original es opcional cuando tienes suficientes luces de neón.

La gira, que los llevará por Francia, Reino Unido y Canadá, es un tratado de libre nostalgia: vender a los europeos su propia decadencia cultural envuelta en ritmos latinos. Y como cereza del pastel, aterrizarán en Brasil para demostrar que incluso la bossa nova sabe mejor con autotune.

Para celebrar su mayoría de edad artística (18 años de existir legalmente, aunque no creativamente), el repertorio incluirá “nuevas” canciones (léase: viejos éxitos con arreglos distintos) porque, como bien saben en la industria, reinventar la rueda es menos rentable que pintarla de colores.