Sergio Mayer Mori, el concursante más disruptivo de La Granja VIP, cuenta con su principal valedor más allá de las pantallas: su progenitor, Sergio Mayer Bretón, quien desde sus plataformas digitales ha justificado el desempeño de su vástago, fruto de su relación con la actriz Bárbara Mori.
La narrativa digital de los involucrados
Mientras Bárbara Mori mantiene un perfil bajo respecto a la participación de su hijo en el certamen, Sergio Mayer padre genera contenido en TikTok para contrarrestar las críticas. Desmiente acusaciones de homofobia, destacando que su círculo íntimo, incluyendo a su hermano Kintaró Mori, forma parte de la comunidad LGBTQ+ y recibe el respeto de su descendiente.
Para el exdiputado, su vástago está generando engagement puro. Su presencia es trending topic en cada gala, un indicador de relevancia en la economía de la atención. Aunque sugiere moderar el lenguaje soez, reconoce su autenticidad al revelar su proceso de abstinencia de cannabis, una sustancia que probó a los 14 años con el consentimiento materno.
La filosofía paterna ante la polémica
Sergio Mayer conceptualiza la soberbia como una fortaleza existencial. El músico de 27 años, padre de una niña de 8, admite que su heredero ingresó al reality para cultivar humildad y deconstruir prejuicios. “Quienes no resonemos con su frecuencia pueden simplemente cambiar de canal. Sergio arribó con un historial mediático complejo, está habituado al escrutinio digital y lo afronta con su estilo genuino”, declaró el creador de Sólo para mujeres.
Mayer Bretón reafirma que su hijo se expuso voluntariamente al juicio colectivo. Reconoce su egocentrismo como un atributo que las familias deberían fomentar. “Mi descendiente es egocéntrico y soberbio, sí… ¿Recuerdan su declaración de ingreso? ‘Vine a trabajar mi humildad’. ¿Acaso la deconstrucción personal es un proceso inmediato? Celebro su seguridad y autoestima elevada; son lecciones que le inculqué y que considero fundamentales para las nuevas generaciones”.
Impacto en la era del contenido viral
Concluyó que quienes se sientan intimidados por el magnetismo de Sergio pueden ejercer su derecho al consumo selectivo de medios, y ratificó que fue él quien le enseñó a abrazar su soberbia como herramienta de empoderamiento personal.



















