La Fachada se Agrieta
A solo veinticuatro horas de la gran final de Miss Universo 2025, el escenario no es solo de glamour, sino de una crisis institucional que amenaza con desmoronar la credibilidad del certamen. Tras la pública reprimenda a Miss México, Fátima Bosch, una nueva y más profunda herida se abre: las renuncias de dos figuras clave del jurado, cargadas de acusaciones que apuntan a una maquinaria de manipulación en las sombras.
Las Renuncias que lo Cambian Todo
La investigación revela que las salidas de Omar Harfouch, pianista y compositor franco-libanés, y de Claude Makélélé, leyenda del futbol francés, no fueron coincidencias. Fueron la explosión controlada de una semana de tensiones internas y señalamientos que cuestionan la esencia misma de la competencia. ¿Qué descubrieron estos jueces que los llevó a abandonar sus puestos a las puertas del evento más importante?
La Acusación Explosiva: Un Jurado Fantasma
La crónica del escándalo la escribió el propio Harfouch en Instagram. Su relato, una bomba de tiempo, describe un “comité de selección” paralelo, un jurado improvisado que, según su testimonio, preseleccionó a 30 concursantes sin la supervisión de los árbitros oficiales. ¿Quién integraba este panel secreto? ¿Qué intereses oscuros guiaban sus decisiones? Harfouch no solo habla de falta de transparencia, sino de un potencial conflicto de interés que corrompe el proceso.
Las declaraciones del artista son un acto de desafío. Afirma haber sido “engañado y utilizado públicamente” y ya ha consultado a un bufete jurídico en Nueva York para emprender acciones legales contra la Organización Miss Universo (MOU) por cargos que incluyen fraude, corrupción y abuso de poder. Su advertencia a los jueces que permanecen es escalofriante: podrían terminar “implicados en un fraude a escala mundial”.
Horas después, Claude Makélélé anunciaba su partida, justificándola con ambiguas “razones personales imprevistas”. Sin embargo, en el contexto de las denuncias de Harfouch, su salida se lee menos como una casualidad y más como la confirmación de un naufragio institucional.
La Respuesta Oficial: Negación y Amenazas
Frente a las graves imputaciones, la MOU se apresuró a emitir un comunicado desmintiendo toda participación de grupos externos. Su defensa sostiene que Harfouch habría confundido el proceso con el programa de impacto social Beyond the Crown. Pero esta explicación, ¿busca aclarar el malentendido o es un intento por desacreditar al denunciante? La organización culminó su postura con una amenaza legal contra el uso no autorizado de su marca, un movimiento que muchos interpretan como un esfuerzo por silenciar las críticas.
Conectando los Puntos: El Antecedente Ineludible
Para comprender la magnitud de esta crisis, es imperioso volver la vista al escándalo previo: la humillación pública de Miss México, Fátima Bosch, por parte del director de la franquicia en Tailandia, Nawat Itsaragrisil. Este incidente, que provocó la solidaridad espontánea de varias concursantes y resonó hasta en la ONU Mujeres y la presidencia de México, no fue un hecho aislado. Fuentes cercanas al proceso confirmaron que el propio Harfouch había actuado como mediador entre Raúl Rocha, el propietario mexicano de la franquicia, y Nawat, en una disputa que incluso incluyó amenazas de demanda cruzadas.
Este dato es crucial: sugiere que las tensiones y los métodos cuestionables venían gestándose desde dentro, mucho antes de que estallaran en el escenario global. La crisis con México no fue la causa, sino el primer síntoma de una enfermedad mayor en la gestión del certamen.
La Revelación Final
La investigación periodística descubre un hilo conductor: un patrón de opacidad y manejo cuestionable que va más allá de un simple error logístico. Las renuncias de los jueces, lejos de ser problemas aislados, parecen ser la punta de un iceberg que revela una lucha de poder interna y una sistemática vulneración de los protocolos de transparencia. Mientras la organización insiste en que el espectáculo debe continuar este viernes en Bangkok, la pregunta que flota en el ambiente es más profunda: ¿se puede confiar en la legitimidad de una corona manchada por las acusaciones de fraude y la sombra de la manipulación?














