Autoridades de Montreal investigan un robo organizado ocurrido en un supermercado de la ciudad, donde un grupo de personas disfrazadas de Santa Claus y duendes sustrajo diversos productos sin pasar por las cajas, en un hecho que ha generado amplia polémica en redes sociales.
El incidente se registró alrededor de las 9:40 de la noche del lunes 15 de diciembre, en plena semana previa a la Navidad. De acuerdo con reportes policiales, los individuos recorrieron los pasillos del establecimiento y salieron con varios carritos llenos de mercancía, ante la sorpresa de clientes y empleados.
La policía de Montreal confirmó que se encuentran revisando las cámaras de seguridad para identificar a los responsables, al considerar que no se trató de una broma, sino de un acto planeado. Hasta el momento no se ha informado sobre personas detenidas.
Poco después del suceso, el grupo activista Les Soulèvements du Fleuve difundió en Instagram videos donde se observa a los sospechosos tomando productos de los estantes. La organización aseguró que los artículos fueron entregados a los llamados “Robins de los Callejones”, quienes los habrían redistribuido entre personas en situación vulnerable y refrigeradores comunitarios.
Los activistas justificaron la acción como una protesta contra las grandes cadenas de supermercados, a las que acusan de elevar de manera excesiva los precios de productos básicos. El hecho ocurre en un contexto económico complejo en Canadá, donde, aunque la inflación general ha mostrado una desaceleración, los precios de los alimentos han aumentado cerca de 5% en el último año, impactando el poder adquisitivo de miles de familias.
Como parte de su protesta, el grupo afirmó haber dejado bolsas de regalo bajo un árbol en un barrio popular, como símbolo de su acción y mensaje contra lo que consideran prácticas abusivas de las grandes empresas.
Por su parte, la cadena de supermercados Metro condenó el acto y rechazó cualquier intento de justificarlo. Su portavoz, Geneviève Grégoire, señaló que ningún motivo legitima un delito contra el comercio minorista y advirtió que este tipo de acciones solo contribuyen a incrementar los precios.
La empresa destacó además que colabora de manera legal con la sociedad, mediante la donación de millones de dólares y toneladas de productos a bancos de alimentos, y subrayó que el robo no representa un acto de justicia social, sino un perjuicio para consumidores, trabajadores y comercios.
El caso continúa bajo investigación, mientras el debate sobre el alza en el costo de los alimentos y las formas de protesta social sigue generando reacciones divididas entre la opinión pública.
