El Gran Teatro de la Diplomacia Mundial
En un giro que solo la más exquisita lógica burocrática podría concebir, el Gran Circo de la Paz Universal ha levantado su carpa en las soleadas playas de Sharm el Sheij. El espectáculo, meticulosamente coreografiado, presenta a una veintena de ilustres marionetas europeas aplaudiendo un acuerdo monumental cuya firma se asemeja a representar Hamlet sin el príncipe de Dinamarca, ni el rey Claudio, ni Ofelia… pero con un elenco de figurantes entusiastas.
El acto principal corre a cargo del Mesías de los Acuerdos Definitivos, el presidente Donald Trump, quien, tras ofrecer un sermón en el sagrado parlamento israelí sobre el advenimiento de una «era dorada» —un concepto tan novedoso como los profetas del Antiguo Testamento—, ha aterrizado en Egipto para sellar un pacto entre dos entidades que han declinado amablemente la invitación: Israel y Hamás. Una solución tan elegante como resolver un divorcio sin la presencia de los cónyuges.
Mientras tanto, el primer ministro Netanyahu, desde la comodidad de su hogar, ha proclamado a Trump como «el mejor amigo que Israel ha tenido jamás en la Casa Blanca», un título que, sin duda, compite en prestigio con el de Campeón Mundial de Golf. La amistad, al parecer, se mide en rehenes liberados y en la capacidad de proclamar nuevas eras desde cómodos escenarios.
En un subplot conmovedor, Hamás ha completado la entrega de los últimos rehenes con vida en la Franja de Gaza. El canje, ejecutado con la precisión de un reparto logístico, ha permitido a Israel comenzar a liberar a «decenas de presos de los cerca de 2.000» prometidos. La aritmética de la libertad es, como siempre, una ciencia inexacta y generosa en sus promesas.
El gran final ha contado con Trump agradeciendo efusivamente a su anfitrión, el presidente Al Sisi, por su «papel muy importante» en esta farsa monumental. Egipto, el anfitrión perfecto para un banquete de paz donde los invitados de honor han preferido cenar en casa. Así se escribe la historia, o al menos, su más hilarante parodia.
