Tragedia en el Huascarán revela los riesgos ocultos del montañismo extremo

LIMA — ¿Qué falló en esta expedición que terminó en tragedia? Las autoridades peruanas confirmaron este jueves el fallecimiento de Chiaki Inada, médica japonesa de 40 años, mientras su compañera Saki Terada, de 36, logró sobrevivir milagrosamente tras quedar atrapadas a 6,600 metros de altitud en el nevado Huascarán, el techo del Perú.

Fuentes de la División de Alta Montaña de la Policía Nacional revelaron a este medio detalles escalofriantes: las temperaturas rondaban los -30°C cuando el equipo de Socorro Andino localizó a las alpinistas. Terada, consciente pero con graves síntomas de hipotermia, fue evacuada en helicóptero. Inada, encontrada inconsciente y en estado crítico, no resistió el traslado.

Documentos obtenidos en exclusiva muestran que las escaladoras activaron su baliza de emergencia el martes al amanecer. ¿Por qué tardó tanto la respuesta? Expertos consultados señalan que las grietas glaciares —cada vez más numerosas por el deshielo— complicaron el acceso. “Era como buscar una aguja en un pajar de hielo”, confesó un rescatista bajo condición de anonimato.

Este incidente no es aislado. Solo esta semana, tres cuerpos más fueron recuperados en el Artesonraju, vecino del Huascarán. Los datos son alarmantes: desde 1970, la Cordillera Blanca ha perdido el 27% de su cobertura glaciar, según el Instituto Nacional de Investigación en Glaciares. ¿Están las autoridades subestimando los nuevos peligros del cambio climático para los montañistas?

La Wilderness Medical Associates, organización a la que pertenecía Inada, emitió un comunicado destacando su labor como médica en zonas remotas. Ironías del destino: una experta en supervivencia, víctima de la montaña que amaba.

Este reportaje deja al descubierto preguntas incómodas: ¿Son suficientes los protocolos de rescate? ¿Deben restringirse las ascensiones durante temporadas de deshielo acelerado? Mientras el Huascarán sigue atrayendo a escaladores de todo el mundo, su nieve —cada vez más inestable— guarda secretos mortales que solo revela cuando es demasiado tarde.