Tras la matanza del pasado domingo en la iglesia de Sutherland Springs, el pastor de otro templo en el sur de Texas ya está tomando medidas para prevenir un ataque semejante.
Tanto él como algunos feligreses portarán armas ocultas durante los servicios religiosos.
“Cuando dijeron una congregación de 50 personas, dije: Esa es nuestra congregación”, señaló Jaime Chapa, pastor en la Iglesia Bíblica El Faro, en Sullivan City, Texas, al comentar su reacción tras enterarse en las noticias del tiroteo masivo en Sutherland Springs, una comunidad cercana.
Chapa ha dirigido la congregación de El Faro, que al igual que Sutherland Springs se encuentra en una zona rural, durante 30 años, por lo cual considera que es su responsabilidad proteger a la iglesia y sus congregantes.
“Esto nunca sucederá en El Faro. Nunca ocurrirá. Lo que sucedió en Sutherland nunca pasará en nuestra iglesia”, aseguró Chapa.
El pastor manifestó que siempre habrá tres personas armadas durante los servicios religiosos que ofrece.
Aseguró que los asistentes no sabrán quiénes son los ministros o feligreses armados, el único objetivo es que su iglesia esté siempre con protección.
PASTOR CON LICENCIA PARA PORTAR ARMAS
El dirigente religioso posee una licencia para portar una pistola oculta, lo mismo que varios de sus feligreses.
El pastor Chapa cree con este plan evitará que su congregación sea vulnerable a un ataque, ya que pagar guardias de seguridad no es una opción desde el punto de vista económico para una iglesia de una comunidad tan pequeña.
Con información de diariolaredo
