Clínica en #Matamoros bajo la lupa 

COLUMNA CONTRA ESPEJO
Por: Karla Pérez

Clínica en #Matamoros bajo la lupa

H. Matamoros Tamaulipas 14 de julio de 2025.- En Matamoros, la próxima apertura de una nueva clínica de salud, ubicada en el fraccionamiento Arboledas, ha encendido un foco de atención no sólo en el ámbito médico, sino también en el político. Trascendió que detrás de este proyecto estaría una exfuncionaria estatal del gobierno de Tamaulipas, vinculada al partido Morena, quien habría financiado la operación y equipamiento del establecimiento a través de una prestanombres.

Aunque el inmueble aún no ha sido inaugurado oficialmente, ya circula entre ciertos círculos médicos como un “espacio de equipo de ultima generacion y altos costos”, lo cual ha despertado suspicacias sobre el verdadero origen de los recursos y los intereses ocultos detrás del negocio.
El caso no es menor, pues se trata de una figura pública que durante su gestión tuvo acceso directo a presupuestos públicos, que hoy, de forma no tan casual, aparecen reflejados en un proyecto privado en esta ciudad fronteriza. Las preguntas no se hacen esperar: ¿fue esta inversión producto de años de ahorro, o es el resultado de información privilegiada y redes de poder construidas al amparo del servicio público? Lo que genera mayor preocupación es el patrón que se repite: funcionarios que, al dejar el cargo, regresan como inversionistas

¿Dónde queda entonces el lema del partido político Morena, ese que se repite con firmeza en cada tribuna? No mentir, no robar y no traicionar al pueblo. Porque en este caso, el pueblo observa, cuestiona y espera respuestas. No basta con discursos de transformación si en los hechos se actúa con las mismas prácticas de siempre: simulación, ocultamiento y uso de poder para beneficio personal. La salud no puede convertirse en trampolín político ni en negocio disfrazado de filantropía. Ya que con esta “inversión”, se dará un fuerte golpe a las demás clínicas que no podrán competir, o mermeran definitivamente sus pacientes.

Orduña: auxilio con rostro humano en Matamoros

En Matamoros, hay historias que no se cuentan en los discursos, pero que se sienten en cada calle y en cada llamada de auxilio. Ambulancias Orduña, encabezada por el señor Gabriel Orduña, ha sido por años un verdadero alivio para cientos de familias que enfrentan emergencias sin tener con qué responder. Ya sea por un accidente, una enfermedad repentina, una inundación o simplemente por no tener cómo trasladar a un ser querido, él y su equipo han dicho presente, sin cobrar, sin pedir nada a cambio.

A eso se suma el esfuerzo incansable de su hija, Gabriela Orduña, quien lidera a los voluntarios con una entrega admirable, recorriendo colonias populares, atendiendo casos a todas horas y demostrando que la empatía también puede organizarse y salvar vidas, además de sumar la reciente apertura del Refugio animal donde son los principales patrocinadores es Gabriel Orduña, y en donde junto con Iván Rescata, les dan voz a los que no tienen.

Pero, lamentablemente quien ha buscado aprovecharse de este gran trabajo, es el político Roberto Lee, quien actualmente es el líder de Movimiento Ciudadamo en Tamaulipas, ya que se le ha visto en las colonias haciendo en vivos en sus redes sociales, con Gabriela Orduña, quien ha trabajado incansablemente por lo matamorenses, usando como puente la buena reputación y el trabajo altruista de esta familia.

El interés de Roberto Lee es buscar de nueva cuenta la candidatura para la presidencia municipal, respaldado por causas que no ha encabezado, pero que ahora busca convertir en plataforma política. La gente no es ajena a esto y, si bien valora los apoyos que puedan llegar, también reconoce quién ha estado siempre y quién aparece solo cuando las elecciones se asoman.

La familia Orduña tiene muchos años llevando esperanza y un respiro cuando más lo necesitan, lo justo es que cada quien trabaje desde su trinchera y no se busque usar a otros para figurar y para que sean bien vistos.

Grupo Fugitivo; la herida abierta de tamaulipas

Pocas tragedias han calado tan hondo en la memoria reciente de Tamaulipas como la muerte de los integrantes del Grupo Fugitivo de Reynosa Tamaulipas. A meses de los hechos, las autoridades aseguran que la investigación sigue abierta, pero lo que permanece verdaderamente abierto es el dolor de las familias. El fiscal general, Irving Barrios, ha informado que tres personas ya fueron vinculadas a proceso por su presunta participación en este caso, y que hay más implicados bajo investigación. Sin embargo, en medio de los tecnicismos legales, lo que resalta es el silencio profundo de unos padres que aún no reciben respuesta completa ni justicia real.

La identificación de los cuerpos incinerados, localizados en Reynosa, no ha concluido. Se siguen analizando restos, se revisan pruebas, pero cada día que pasa sin certeza se convierte en una tortura silenciosa para los seres queridos de las víctimas. No se trata de una carpeta más en la Fiscalía. Se trata de vidas truncadas, de jóvenes que alegraban fiestas y escenarios, y que terminaron en manos de una violencia absurda que no respeta ni la música ni la vida.

Lo más alarmante es que, como en tantos otros casos en Tamaulipas, las familias han tenido que luchar no solo contra la pérdida, sino también contra la burocracia, el tiempo y la falta de respuestas claras. La justicia no solo se mide en detenciones, sino en la dignidad con la que se trata a quienes esperan. Y hoy, esa dignidad está en deuda con las madres, padres y hermanos del Grupo Fugitivo. Porque más allá de los expedientes, lo que está en juego es la memoria de quienes jamás debieron haber sido olvidados entre llamas.

En el mundo que gira y gira, nada es lo que parece

Por: Karla Pérez