Por Karla Pérez
Matamoros Tamaulipas a 09 de septiembre de 2025.- En México las denuncias parecen tener fecha de caducidad, o al menos se activan cuando resulta mediáticamente conveniente. Hoy todos celebran la caída del vicealmirante Manuel Roberto Farías Laguna y la red de huachicol fiscal en #Tamaulipas, pero lo que nadie quiere recordar es que esta historia no comenzó con el buque cargado con más de 10 millones de litros de diésel descubierto en Tampico en 2025. No, esta novela arrancó en 2023, cuando el entonces secretario de Marina, Rafael Ojeda Durán, ya había señalado con claridad que dentro de sus propias filas algo olía mal, y no precisamente a combustible.
Las denuncias ahí estaban, pero se guardaron en el cajón de “cuando haya tiempo”. Qué curioso: el país perdió más de 9 mil millones de dólares al año en evasión fiscal, el contrabando de combustibles se duplicó, y mientras tanto, los barcos seguían entrando y saliendo con papeles que decían “aditivos” en lugar de gasolina. Una especie de comedia de errores donde todos sabían el truco, pero nadie veía nada, hasta que llegó el momento estelar de la fotografía oficial.
Claro, la explicación es simple: las investigaciones llevan tiempo, dijo la Presidenta de México Claudia Sheinbaum. Dos años, para ser exactos, porque parece que los expedientes necesitan reposar como buen vino antes de convertirse en justicia. Entre tanto, las arcas públicas se desangraban y los operadores hacían negocio a plena luz del día. Y como si faltara ironía, fue el asesinato de un contralmirante incómodo en 2024 lo que terminó forzando la lupa sobre esta red. O sea, primero la sangre y luego la acción.
Hoy vemos titulares triunfalistas: “El mayor golpe contra la corrupción en lo que va del sexenio”. Como si hubieran descubierto algo que nadie sospechaba. No, el hallazgo estaba escrito desde 2023, pero al sistema le encanta hacerse el sorprendido. El mensaje que queda es claro: puedes denunciar lo que quieras, pero hasta que no haya un barco cargado de diésel frente a la cámara, tu voz no vale. Y mientras tanto, los millones evaporados y las muertes quedan como simples notas al pie.
En el mundo que gira y gira nada es lo que parece…