Por Ángel Domínguez
Matamoros, Tamaulipas.– En lo que va de la actual administración municipal, tres elementos de la Dirección de Tránsito han sido separados de su cargo tras comprobarse su participación en actos de corrupción. La medida busca reforzar la confianza ciudadana y erradicar las malas prácticas en la corporación.
José Luis García Castillo, director de Tránsito en Matamoros, informó que, aunque no se han recibido denuncias formales ante la Contraloría Municipal, las evidencias difundidas a través de redes sociales han sido suficientes para proceder con las sanciones correspondientes.
“El comportamiento es reprobable ante la sociedad, motivo por el cual el elemento se va a dar de baja. Conforme a derecho, se levanta un acta administrativa y se turna el caso a Recursos Humanos y Contraloría Municipal para ejecutar la baja”, explicó el funcionario.
García Castillo exhortó a los ciudadanos a no ser partícipes de este tipo de conductas, conocidas como “mordidas”, que se presentan cuando automovilistas buscan evitar una infracción por incumplir el reglamento de tránsito. Recalcó que el silencio o complicidad de la sociedad contribuye a perpetuar estas prácticas.
Asimismo, llamó a la población a presentar sus denuncias y quejas de manera formal en caso de haber sido objeto de irregularidades por parte de los agentes viales, ya que contar con reportes directos fortalece las acciones disciplinarias y da mayor sustento legal a las sanciones.
El director de Tránsito enfatizó que a los elementos se les recuerda a diario la importancia de actuar con criterio, responsabilidad y sobre todo humildad, valores esenciales para desempeñar un servicio público con honestidad y respeto hacia la comunidad.
La administración municipal ha insistido en mantener una línea de cero tolerancia hacia los actos de corrupción dentro de las corporaciones de seguridad y vialidad. La destitución de los tres elementos refuerza esta postura como parte de una política de transparencia.
Con estas acciones, la Dirección de Tránsito busca consolidar una nueva cultura de servicio hacia los ciudadanos de Matamoros, en la que prevalezca el cumplimiento de la ley y se destierre cualquier práctica que dañe la confianza de la sociedad en sus autoridades.