Destitución del comandante de Bomberos causó indignación entre población y fuerzas vivas

Luego de que fuera dada a conocer la información que de manera exclusiva obtuvo #EditorialMillenial en cuanto a la sorpresiva destitución del comandante de Bomberos, Humberto Francisco Salazar López; existió una fuerte reacción por parte de diversos sectores de la población, incluyendo fuerzas vivas y empresarios, quienes han externado indignación a través de las redes sociales. 

 

La desaprobación de la opinión pública acrecentó aún más, pues todo hace indicar que la destitución de Salazar López es parte de la venganza de aquellos que han sido expuestos por malos manejos y desvió de varios millones de pesos del Patronato o asociación. 

 

Se sabe que en diversas ocasiones el comandante fue presionado por sus superiores e intentaron callarlo, al ser el único comandante en romper el silencio y poner en evidencia las carencias del departamento; además de señalar una y otra vez el presunto desfalco por años del llamado «Peso Voluntario» de la Junta de Aguas y Drenaje. 

 

El aguerrido servidor público enfrentó al Dr. Miguel Treviño, presidente del Patronato; exigiendo que rindiera cuentas de los más de 10 millones de pesos por más de 10 años que tiene al frente, recurso proveniente de la contribución de la JAD y que tiene como origen el descuento directo que se aplica al recibo de miles de usuarios del organismo operador del agua. 

 

Salazar López se caracterizó por luchar no sólo por mejorar las condiciones laborales de los elementos, sino también por conseguir una gran cantidad de donaciones en especie y equipamiento a través de asociaciones civiles, altruistas y particulares. 

 

Hoy a dos días de su remoción del cargo y transferencia al departamento de Servicios Generales, el apoyo queda de manifiesto e incluso en redes sociales realizaron el hashtag #YoConHumberto y convocan a una protesta frente a palacio municipal para demandar a la máxima autoridad le devuelvan su puesto como jefe de los apagafuegos. 

 

Por: Pedro Pablo Arellano Ortiz.