Matamoros, Tamaulipas. – A lo largo de los 20 kilómetros que comprende Playa Bagdad, desde la boca del río hacia el sur, se han identificado miles —e incluso millones— de fragmentos de un material sintético que correspondería al recubrimiento interno de un propulsor espacial, de acuerdo con los reportes de inspección realizados en la zona costera.
Los residuos, de apariencia plástica y consistencia ligera, se encuentran esparcidos en distintos puntos del litoral. Especialistas advierten que este tipo de fragmentos representa un riesgo para la fauna marina, ya que pueden ser ingeridos por peces, tortugas y aves que habitan o transitan en la región.
Autoridades ambientales y grupos comunitarios mantienen vigilancia y continúan con las labores de recolección, documentación y análisis del material encontrado, con el objetivo de determinar su procedencia y posibles efectos ecológicos.