Matamoros, Tam.– Con el corazón lleno de gratitud y la mirada serena de quien ha vivido un siglo de historias, doña Bruna Martínez celebró sus 100 años de vida acompañada de sus hijos, nietos, bisnietos y tataranietos, en una emotiva reunión familiar que refleja el amor y las bendiciones que ha sembrado a lo largo de su vida.
Entre risas, abrazos y lágrimas de emoción, la familia Martínez se reunió desde distintos puntos del país para acompañar a la querida matriarca, quien, con gran lucidez, disfrutó cada detalle de la fiesta organizada en su honor. “Desde temprano estuvo viendo cómo le arreglábamos todo; era la más feliz de todos”, compartió su nieta Laura Castillo.
Doña Bruna es madre de cinco hijos, orgullosa abuela de 24 nietos, bisabuela de 49 bisnietos y tatarabuela de ocho pequeños más, quienes representan las generaciones que ha visto crecer y formarse bajo su ejemplo de amor, fe y fortaleza.
Entre los asistentes también se encontraba su hija Irene Hernández, quien viajó desde Vallarta, Jalisco, para no perderse este momento tan especial. “No podía faltar. Cumplir 100 años no es cualquier cosa, y tener todavía a mi madre con nosotros es un regalo enorme. Estoy muy agradecida con Dios y también con mi hermana, que ha sido quien más la cuida día a día”, expresó emocionada.
El ambiente estuvo lleno de nostalgia y alegría. Los más jóvenes corrían entre mesas mientras los mayores recordaban anécdotas de la infancia y los años difíciles que doña Bruna siempre enfrentó con entereza. La familia coincidió en que su longevidad es fruto del amor, la fe y los cuidados constantes que ha recibido.
“Para mí es un privilegio tenerla aquí conmigo todavía”, comentó su hija encargada de cuidarla.
Entre música, flores y oraciones, doña Bruna celebró su cumpleaños número cien rodeada por decenas de rostros que llevan su sangre. En cada mirada se notaba el orgullo y la gratitud hacia quien ha sido el pilar y el corazón de la familia Martínez.
El festejo no solo marcó un siglo de vida, sino también un legado de amor y unidad que continuará vivo en las generaciones futuras.
