Onda de calor quema más de 25 mil hectáreas de sorgo.

Por Ángel Domínguez

La reciente ola de calor, superando los 40 grados, ha causado estragos en la región agrícola de Matamoros. Más de 25 mil hectáreas de sorgo han sido severamente afectadas, según el presidente de la Asociación Agrícola, Rogelio García Moreno. Las temperaturas, comparables a la canícula, han provocado daños irreparables en las cosechas, especialmente en áreas como San Fernando, Valle Hermoso y Matamoros. Las plantas, privadas de la humedad necesaria, se están marchitando desde la raíz. A pesar de la esperanza por un cambio climático, los agricultores aguardan con ansias las predicciones de lluvia para los próximos días, anticipando un alivio en las temperaturas que podría mitigar los efectos devastadores del calor extremo.

La región agrícola de Matamoros se encuentra en estado de alerta mientras lucha contra una feroz ola de calor que ha dejado a más de 25 mil hectáreas de sorgo en ruinas. Rogelio García Moreno, presidente de la Asociación Agrícola, describe estas temperaturas como atípicas y comparables a la temida canícula.

«Estamos enfrentando una situación sin precedentes», declara García Moreno. «El calor ha sido implacable, y nuestras cosechas están sufriendo las consecuencias».

Las zonas más afectadas, incluyendo San Fernando y partes de Valle Hermoso y Matamoros, han visto cómo sus campos se convierten en un paisaje desolador de plantas marchitas y quemadas desde la raíz. La falta de precipitaciones agrava aún más la situación, ya que las plantas luchan por obtener la humedad necesaria para sobrevivir.

Sin embargo, hay un atisbo de esperanza en el horizonte. Según los pronósticos meteorológicos, se espera que las temperaturas desciendan en los próximos días, con la posibilidad de lluvias que podrían brindar un alivio tan necesario para los agricultores de la región.

A pesar de la incertidumbre y los desafíos que enfrentan, los agricultores de Matamoros mantienen la esperanza y la determinación de superar esta crisis climática y proteger sus medios de vida.

La sequía sin precedentes y la ola de calor extrema han dejado una marca devastadora en la región agrícola de Matamoros, con más de 25 mil hectáreas de sorgo afectadas por las altas temperaturas. Los agricultores, enfrentando una situación crítica, aguardan con esperanza las predicciones de lluvia que podrían traer un alivio a esta crisis climática sin precedentes.