Matamoros, Tamaulipas. — El representante del sector de turismo médico en Matamoros, Alberto Casanova, informó que la actividad médica privada se mantiene estable, aunque con una disminución del 20 % en la llegada de pacientes extranjeros, lo que ha obligado a depender más del mercado local para sostener la operación de clínicas y consultorios.
“En esta temporada estamos bajos; esperamos que detone algo en la época decembrina y durante el Buen Fin. Ahorita, el paciente local representa cerca del 40 % de la actividad total”, explicó Casanova.
El empresario detalló que, si bien en años anteriores el turismo médico fronterizo representaba la mayoría de las atenciones, actualmente el flujo se ha reducido por precauciones de residentes o ciudadanos estadounidenses que evitan cruzar la frontera ante posibles revisiones migratorias o incidentes en los cruces internacionales.
“No podemos decir que las redadas sean la causa directa, pero sí hay temor de algunos visitantes respecto a poder regresar con tranquilidad; eso influye”, señaló.
Casanova reconoció que, además, la relación con autoridades locales ha sido compleja, pues algunas clínicas han enfrentado multas o revisiones administrativas que generan incertidumbre entre los prestadores de servicios.
Pese a este panorama, afirmó que el sector mantiene infraestructura y personal médico certificado, con el objetivo de conservar la confianza de pacientes tanto locales como foráneos.
“Tenemos la infraestructura y la capacitación adecuada para atenderlos; nuestra estrategia es brindar seguridad y confianza, trabajando con doctores colegiados y con transporte autorizado desde los puentes internacionales”, añadió.
El representante del turismo médico confió en que la temporada decembrina reactive la llegada de pacientes provenientes de Estados Unidos y otras ciudades, lo que permitiría recuperar los niveles de ocupación y atención previos a la caída del 20 % registrada en los últimos meses.
El turismo médico es uno de los sectores con mayor potencial en Matamoros, al combinar la atención especializada con precios competitivos, sin embargo, su recuperación depende de factores externos como la movilidad fronteriza y la percepción de seguridad.