Oaxaca, México.– Como parte de las investigaciones para determinar las causas del descarrilamiento de un tren en el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, autoridades federales revisarán el registrador electrónico de eventos, conocido como pulser, informó el almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles, secretario de Marina.
Desde un enlace durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, el titular de la Semar explicó que la Agencia de Transporte Ferroviario, en coordinación con la Fiscalía General de la República (FGR), estará a cargo de la evaluación técnica del siniestro. Precisó que toda la evidencia se encuentra bajo cadena de custodia, incluido el dispositivo electrónico del tren.
El pulser funciona como una caja negra ferroviaria, al registrar de manera continua datos clave de la operación del convoy, como velocidad, posición del acelerador, presión del sistema de frenos, dirección de avance y otras señales críticas de la locomotora. El dispositivo cuenta con memoria resistente a impactos, lo que permite documentar el comportamiento del tren en tiempo real previo y durante el accidente.
El análisis de este equipo será fundamental para reconstruir los hechos y establecer responsabilidades, en un contexto donde ya se habían identificado riesgos estructurales en la infraestructura ferroviaria del Istmo.

En octubre pasado, el Programa Institucional del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec 2025-2030 advirtió que la operación del sistema ferroviario requería mecanismos formales de gestión de riesgos, así como acciones preventivas para atender interrupciones del servicio.
El documento reconoce que, antes del proceso de rehabilitación, las vías del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec se encontraban inactivas para el transporte regular, debido a su deterioro y obsolescencia, lo que limitaba su funcionalidad tanto para el traslado de carga como de pasajeros.
El programa establece que el desarrollo de la infraestructura ferroviaria debe ir acompañado de planes integrales de mantenimiento preventivo, supervisión técnica constante y estrategias de gestión de contingencias, incluyendo fenómenos climáticos extremos y fallas operativas.
Asimismo, identifica como desafíos clave del proyecto la resiliencia, el mantenimiento y la sostenibilidad, elementos considerados indispensables para garantizar la circulación segura de los trenes y la continuidad del servicio.
Las autoridades federales indicaron que conforme avancen los peritajes y el análisis del registrador de eventos, se dará a conocer información adicional sobre las causas del descarrilamiento y las medidas que se implementarán para fortalecer la seguridad del sistema ferroviario del Corredor Interoceánico.














