Protección contra el golpe de calor en mascotas: Guía técnica para dueños responsables

Ante las temperaturas extremas que superan los 40°C en diversas regiones, resulta crucial implementar protocolos de prevención para salvaguardar la salud de nuestras mascotas. El golpe de calor constituye una emergencia veterinaria grave que puede comprometer seriamente el bienestar animal. A continuación, presentamos un análisis exhaustivo sobre su identificación y prevención.

Síntomas clínicos del golpe de calor en animales domésticos

• Taquipnea excesiva: El jadeo intenso, con frecuencia respiratoria elevada o patrones irregulares, constituye un signo temprano de hipertermia.
• Letargia marcada: Disminución de la actividad motora y períodos prolongados de somnolencia.
• Ataxia: Pérdida de coordinación motriz y dificultades en el mantenimiento postural.
• Anorexia: Rechazo al consumo de alimentos y disminución del apetito.
• Alteraciones conductuales: Cambios bruscos en el temperamento habitual del animal.
• Síncope: Pérdida transitoria de conciencia que requiere intervención veterinaria inmediata.

Protocolo de prevención térmica

Hidratación estratégica

Mantener múltiples puntos de agua distribuidos en el hogar, con recipientes de acero inoxidable o cerámica que conserven mejor la temperatura. Se recomienda renovar el líquido al menos tres veces al día para garantizar su frescura.

Regulación de actividad física

Restringir los paseos a las primeras horas matutinas (antes de las 10:00) o vespertinas (después de las 18:00). Evitar ejercicios intensos durante los períodos de máxima radiación solar (12:00-16:00).

Protección podal

Las almohadillas plantares son particularmente sensibles a las superficies calientes. Realizar pruebas de temperatura en el pavimento con el dorso de la mano (7 segundos como máximo) antes de permitir el tránsito animal.

Control ambiental

Garantizar espacios ventilados con acceso permanente a zonas sombreadas. En ambientes exteriores, proveer estructuras con techos aislantes y ventilación cruzada.

Manejo del pelaje según características raciales

El manto capilar cumple funciones termorreguladoras esenciales. Su manejo debe adaptarse a las necesidades específicas de cada raza:

Razas nórdicas

Ejemplares como el Husky Siberiano o San Bernardo poseen doble capa de pelo diseñada para aislación térmica. La rasurada completa altera su mecanismo natural de termorregulación y aumenta el riesgo de quemaduras solares.

Razas de pelo largo

Para caninos como el Yorkshire Terrier o Caniche, se recomienda un trimming estacional (3-5 cm de longitud) que facilite la circulación de aire sin eliminar completamente la protección capilar.

Mantenimiento higiénico

Cepillado diario con herramientas adecuadas (rastrillo de púas largas para razas de doble manto, cardas para pelo rizado) previene la formación de nudos que impiden la correcta ventilación cutánea.

Consideraciones finales

La fisiología canina y felina presenta limitaciones en los mecanismos de termodisipación (solo sudan a través de cojinetes plantares y regulan temperatura principalmente mediante jadeo). Esto los hace particularmente vulnerables a los efectos de la hipertermia ambiental.

Ante cualquier manifestación clínica sospechosa, se debe:

1. Trasladar al animal a zona fresca inmediatamente
2. Aplicar compresas frías (no heladas) en ingles y axilas
3. Ofrecer agua fresca sin forzar la ingesta
4. Contactar urgentemente con un médico veterinario

Recuerde que la prevención constituye la estrategia más efectiva para preservar la salud de sus compañeros animales durante los períodos de calor extremo.

Fuente: MegaNews | Adaptación técnica: Departamento de Bienestar Animal