Un grito colectivo desde la primera línea climática
Una coalición de más de 40 colectivos comunitarios, cooperativas pesqueras y organizaciones de defensa del territorio en los estados de Yucatán, Campeche, Veracruz y Tabasco ha alzado la voz. Su denuncia es clara: las afectaciones en el Golfo de México vinculadas a la industria de los hidrocarburos continúan, mientras las respuestas gubernamentales se quedan en promesas y supervisiones insuficientes.
La crisis sistémica que no entiende de fronteras
Los impactos no son incidentes aislados, sino una realidad sistémica que erosiona los ecosistemas costeros, compromete la salud pública y dinamita la economía local. La degradación de pesquerías, la afectación de manglares cruciales como sumideros de carbono, la contaminación de playas y el daño a especies marinas protegidas pintan un panorama de emergencia regional. Para estas comunidades, el discurso oficial sobre altos estándares ambientales choca frontalmente con su vivencia diaria.
De la alerta a la acción: un llamado ignorado
Desde octubre, este movimiento había dirigido un llamado urgente a la presidenta Claudia Sheinbaum y a la secretaria de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, buscando colocar la protección integral del Golfo en la agenda prioritaria, incluso antes de la COP30. Sin embargo, el evento catalizador fue la llegada de chapopote a playas de Alvarado, Veracruz, en diciembre, que contaminó zonas de trabajo pesquero y espacios costeros de uso comunitario, confirmando la falta de protocolos de prevención y respuesta efectiva.
Exigencias para una transición justa y real
Frente a esta inercia, la coalición presenta demandas concretas y vanguardistas: la moratoria inmediata a la extracción de hidrocarburos en aguas profundas y someras, la aplicación del principio “quien contamina paga” para exigir reparación integral por parte de las corporaciones responsables, y la implementación de modelos de gobernanza participativa donde las comunidades co-diseñen las estrategias de protección. Exigen una reunión urgente para construir, de manera colaborativa, un nuevo paradigma de desarrollo que priorice la resiliencia de los ecosistemas marinos y los derechos de más de 15 millones de personas cuya cultura y sustento dependen del mar.
La red de resistencia: guardianes del territorio
Esta petición está respaldada por una poderosa red de actores locales, incluyendo al Consejo Consultivo de Tortugueros de Campeche, el Campamento Tortuguero Laguna de Términos, los Ecoguardianes de la Laguna de Términos, el Comité de Manejo de la Zona de Refugio Pesquero Punta del Tigre y la cooperativa de mujeres pescadoras Las Bonitas de Alvarado. Se suman colectivos de innovación socioambiental como Rebirthreef, el Colectivo Altepee, el Colectivo de Comunicación Comunitaria La Ruta Salvaje, la Red del Corredor Arrecifal del Golfo de México, y la organización Territorios Diversos para la Vida, tejiendo un frente común por la justicia climática y la soberanía de sus territorios.











