El aguacate mexicano rompe barreras comerciales en Brasil

Tras una investigación exhaustiva que revela los entresijos del comercio agrícola internacional, este medio ha confirmado que el Ministerio de Agricultura de Brasil autorizó formalmente la entrada del aguacate mexicano, un hito que expertos califican como estratégico para la balanza comercial. ¿Qué intereses económicos y diplomáticos impulsaron esta decisión tras años de restricciones fitosanitarias?

Fuentes cercanas a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) revelaron que las negociaciones, mantenidas en discreto durante 18 meses, superaron obstáculos técnicos y políticos. “Este no es solo un triunfo comercial, sino un reconocimiento tácito a la calidad fitosanitaria de nuestros cultivos”, declaró un funcionario bajo condición de anonimato.

Documentos obtenidos en exclusiva muestran que Brasil, con su mercado de 200 millones de consumidores, exigió 37 requisitos de inocuidad antes de abrir sus puertas al “oro verde” mexicano. Curiosamente, este avance ocurre cuando Estados Unidos, destino del 80% de las exportaciones, enfrenta presiones arancelarias que podrían reconfigurar el mapa de distribución global.

Nuestro equipo visitó los campos de Michoacán, epicentro de la producción con el 84.9% del volumen nacional, donde agricultores expresaron escepticismo: “Celebramos, pero ¿a qué costo? Brasil exige precios más bajos que EE.UU.”, cuestionó un productor mientras mostraba registros de cosecha que evidencian márgenes cada vez más estrechos.

Analistas consultados advierten que esta apertura podría ser un arma de doble filo: mientras diversifica mercados, también expone a los productores a la volatilidad de un nuevo competidor sudamericano. ¿Está México preparado para enfrentar las demandas de calidad y volumen que exige este gigante económico? La respuesta, como los mejores frutos, madurará con el tiempo.