Conéctate con nosotros

Nacional

El INE se desmorona mientras Taddei juega a las sillas musicales con el poder

El INE acumula bajas estratégicas mientras la presidenta ejerce sus nuevas facultades con mano firme.

Avatar

Publicado

en

CIUDAD DE MÉXICO.- En un espectáculo digno de circo romano, el Instituto Nacional Electoral (INE) celebra su cuarta deserción en áreas directivas este mes. El último gladiador en abandonar el coliseo burocrático es Giancarlo Giordano, quien —tras descubrir que “vinculación con organismos locales” significaba escuchar quejas infinitas— entregó su toga y huyó.

Giordano, recordemos, fue uno de esos raros nombramientos por consenso en 2023, cuando el INE aún fingía ser una democracia. Hoy, bajo el reinado de Guadalupe Taddei y sus superpoderes legislativos, los cargos se reparten como dulces en piñata partidista: sin mirar y con los ojos vendados.

La lista de fugados incluye a Miguel Ángel Patiño (que prefirió organizar su propia fiesta electoral), María Elena Cornejo (quien optó por educar cívicamente a su perro en lugar de a los ciudadanos), y Hugo Patlán (cansado de contender con lo contencioso). Todos coincidieron en que tres semanas bajo el nuevo régimen equivalían a una década en el Gulag.

Anuncio

Mientras tanto, la presidenta —ahora con facultades dignas de emperatriz— ha empezado a colocar a sus fieles en puestos clave. Roberto Félix, rechazado como secretario ejecutivo, fue premiado con la dirección de Organización Electoral: consuelo de burocratas que confirma que en el INE, como en el amor, la segunda opción siempre paga los platos rotos.

El colmo llegó con el ascenso de Mario Velázquez Miranda, exasesor y ahora zar de la UTCE, demostrando que en la meritocracia electoral mexicana, el mejor currículum es haber desayunado con la jefa. ¿Reforma electoral? Más bien musical de sátira política donde los mismos actores cambian de disfraz cada acto.

Anuncio
Anuncio

Ultimas Publicadas

Anuncio

Lo mas visto del día