Septiembre: Un mes de fiesta y de entender nuestros derechos
Con los años, he visto cómo septiembre se convierte en un torbellino de patriotismo y alegría para los mexicanos, pero también en una fuente de confusión laboral. La emoción por celebrar nuestras Fiestas Patrias es palpable, sin embargo, desde mi experiencia, siempre surge la misma pregunta entre los trabajadores: ¿qué pasa si me toca trabajar?
Permítanme aclarar algo que he tenido que explicar incontables veces a lo largo de mi carrera. Aunque el 15 de septiembre es la noche del emblemático Grito de Independencia, la realidad legal es que esta fecha no está contemplada en la Ley Federal del Trabajo como un día de descanso obligatorio. La celebración grande, en términos laborales, es al día siguiente.
El 16 de septiembre: El verdadero feriado oficial
El 16 de septiembre, que conmemora el inicio formal de la lucha por nuestra independencia, sí es un feriado oficial. Esto significa que, por ley, todo trabajador tiene el derecho irrenunciable a descansar con goce de sueldo. He sido testigo de demasiados casos en los que los empleadores, ya sea por desconocimiento o mala fe, intentan evadir esta responsabilidad.
La regla de oro: El pago triple
Aquí viene el conocimiento práctico que todo asalariado debe llevar consigo. Si por razones de servicio necesitas laborar el 16 de septiembre, la ley es muy clara y contundente. Tu patrón está obligado a pagarte tu salario normal más un doble adicional. En la práctica, esto se traduce en un sueldo triple por esa jornada específica.
Este principio aplica sin excepción, independientemente de si tu esquema de pago es diario, semanal, quincenal o mensual. Y un dato que muchos pasan por alto: si el feriado coincide en domingo, a ese triple se le debe sumar la prima dominical del 25%. He asesorado a trabajadores que han logrado el reconocimiento de este derecho, y les aseguro que conocer la ley es su mejor herramienta.
¿Qué hacer si no cumplen?
Lamentablemente, he visto demasiados incumplimientos. Si tu empleador se niega a pagar conforme a la ley, no estás solo. La Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (Profedet) ofrece asesoría y conciliación gratuita. Los patrones que violan estas disposiciones se enfrentan a sanciones económicas significativas. Mi consejo, basado en años de experiencia, es siempre primero buscar el diálogo, pero documentando todo. Si eso falla, acudir a las instancias correspondientes no es una opción, es una necesidad para defender lo que por derecho te corresponde.
Celebremos nuestra independencia, pero también defendamos con orgullo los derechos que tanto costó conseguir.