CIUDAD DE MÉXICO. El huracán ‘Erick’ ha escalado a categoría 2 en su trayectoria hacia las costas del sur de México, desatando alertas en Oaxaca y Guerrero. ¿Podría esta fuerza natural convertirse en un catalizador para repensar la infraestructura resiliente en zonas vulnerables?
Según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EE.UU., el fenómeno meteorológico avanza hacia el noroeste a 15 km/h, con pronósticos de aceleración en las próximas horas. “No solo es un desafío climático, sino una oportunidad para innovar en sistemas de alerta temprana”, señalan expertos en gestión de riesgos.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) advierte lluvias extraordinarias en Oaxaca y torrenciales en Chiapas y Guerrero. Imagine si canalizáramos esa agua para recargar acuíferos en lugar de solo temer sus efectos destructivos.

Huracán Erick: lecciones para el futuro
18 / Junio / 2025
Hasta 51 cm de lluvia revelan la urgencia de soluciones disruptivas para gestión hídrica en zonas tropicales.
¿Y si en lugar de resistir a la naturaleza, aprendiéramos a colaborar con su poder? La crisis climática exige pensamiento lateral: desde arquitectura flotante hasta cosecha de lluvia con inteligencia artificial.