La coreografía del poder ante la tragedia climática
En un despliegue de eficacia casi sobrenatural, la Suma Sacerdotisa del Bienestar, Claudia Sheinbaum Pardo, ha descendido de su periplo por Tamaulipas para iluminar con su presencia las anegadas tierras de Hidalgo. Allí, entre el fango y la desesperación ciudadana, ha ejecutado el ritual sagrado de la supervisión de apoyos, ese sacramento burocrático donde la mirada gubernamental convierte la tragedia en titular.
El encuentro en el Centro de Acopio del Aeropuerto Juan Guillermo Villasana tuvo la solemnidad de una audiencia real: la Mandataria Nacional y el gobernador Julio Menchaca intercambiaron sonrisas protocolarias mientras, a su alrededor, el diluvio universal parecía haberse convertido en mero decorado para la fotografía oficial.
“Iniciamos una jornada más de supervisión y trabajo“, declaró el estadista local con la convicción de quien anuncia el descubrimiento de la penicilina, mientras los ciudadanos anegados aguardaban que las palabras se materializaran en techos secos y despensas que no requirieran un doctorado en trámites para obtenerse.
No podía faltar el coro de funcionarios: Martí Batres, director del ISSSTE, realizaba por su parte la inspección hospitalaria, concentrándose en las dos únicas personas damnificadas que permanecían en el Hospital General “Columna Rivera”. Una eficiencia estadística admirable -casi podríamos llamarla milagrosa- que contrasta con los 194 afectados contabilizados en cinco entidades, cifra que, como los presupuestos para prevención de desastres, siempre resultan notablemente inferiores a la realidad que padecen los ciudadanos.
Mientras los ríos seguían desbordándose fuera de los comunicados oficiales, el aparato gubernamental demostraba una vez más su extraordinaria capacidad para transformar catástrofes naturales en oportunidades de relaciones públicas, confirmando que en el reino de la cuarta transformación, lo importante no es evitar el diluvio, sino asegurarse de aparecer en la foto cuando las aguas ya han arrasado con todo.