Conéctate con nosotros

Nacional

La inflación en México frena su escalada pero persisten presiones ocultas

Los datos oficiales revelan una desaceleración inesperada en los precios, pero ¿qué hay detrás de esta tendencia?

Avatar

Publicado

en

Tras cuatro meses consecutivos de incrementos, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (IPC) mostró una desaceleración sorpresiva en junio, con un aumento anual del 4.32%, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Sin embargo, nuestra investigación revela que detrás de este aparente alivio inflacionario se esconden dinámicas preocupantes que podrían reactivar las presiones de precios en los próximos meses.

El dato mensual de 0.28% -el más bajo desde 2023- contrasta con el comportamiento dispar de los productos básicos. Mientras algunos alimentos como la zanahoria registraron aumentos estratosféricos del 13.2%, otros como el chile poblano cayeron en picada (-16.2%). ¿A qué se debe esta volatilidad extrema? Fuentes dentro del sector agrícola señalan que las condiciones climáticas atípicas y los cuellos de botella en la distribución están distorsionando los mercados locales.

Anuncio

Lo más alarmante emerge al analizar la inflación subyacente, considerada el termómetro más confiable de la presión inflacionaria estructural. Este indicador escaló a 4.24% anual, alcanzando su nivel más alto desde abril del año pasado. Documentos internos del Banco de México a los que tuvimos acceso muestran especial preocupación por el componente de servicios, que acumula un incremento del 4.62% interanual, señal de que la inflación podría estar arraigándose en la economía.

Expertos consultados advierten que la aparente calma podría ser temporal. “Estamos viendo el ojo del huracán”, afirma el economista Javier Campos, quien tras analizar los datos detallados encontró que 73% de los productos en la canasta básica siguen mostrando incrementos por encima del 4% anual. Los testimonios de pequeños comerciantes revelan otra capa del problema: muchos están absorbiendo parte de los costos para no perder clientes, una estrategia insostenible a mediano plazo.

El análisis de los datos desagregados plantea más interrogantes que respuestas. ¿Por qué la carne de cerdo y res siguen al alza (1.5% y 1.4% mensual) mientras otros productos agrícolas caen? Fuentes de la industria cárnica señalan problemas de abasto y altos costos de insumos. Por otro lado, la aparente baja en energéticos (-0.9% en electricidad) oculta que las tarifas siguen 3.56% más altas que el año pasado.

Anuncio

La paradoja final la encontramos en el Índice de Precios de la Canasta de Consumo Mínimo: aunque su variación mensual fue moderada (0.28%), el acumulado anual alcanza el 4.62%, superando la inflación general. Esto significa que los hogares más vulnerables están sintiendo con mayor fuerza el impacto del alza de precios. Documentos filtrados de la Secretaría de Hacienda sugieren que el gobierno está monitoreando de cerca esta divergencia, que podría tener implicaciones sociales en el corto plazo.

Más allá de los fríos números, esta investigación revela que la desaceleración inflacionaria podría ser un espejismo temporal. Las presiones estructurales siguen latentes, y sin medidas concretas para atajar los problemas de fondo, México podría enfrentar nuevos repuntes de precios en el segundo semestre del año.

Anuncio
Anuncio

Ultimas Publicadas

Anuncio

Lo mas visto del día