Conéctate con nosotros

Nacional

La justicia llega a paso de tortuga para el caso LeBarón

Un nuevo capítulo en la búsqueda de justicia para las víctimas de la masacre LeBarón revive el debate sobre la impunidad en México.

Avatar

Publicado

en

Foto: El Universal.

CIUDAD JUÁREZ, Chih. — En un giro que nadie esperaba (excepto quizá los familiares de las víctimas, los activistas y todo aquel que no haya perdido la fe en el sistema), Jacinto N., alias “El Monster”, fue finalmente aprehendido por su presunta participación en el asesinato de Rhonita María Miller durante la masacre de la familia LeBarón en 2019. Sí, han leído bien: cuatro años después, la justicia mexicana logró lo imposible: actuar. Aunque, como es tradición, a un ritmo que haría parecer a una tortuga galopante.

Según el emotivo mensaje de Adrián LeBarón en X (antes Twitter, para los nostálgicos), este sujeto estuvo “muy cerquita” de su hija en sus últimos momentos. “Quizá escuchó sus súplicas, quizá vio cómo la vida se le escapaba”, escribió con una mezcla de dolor y sarcasmo involuntario hacia un sistema que permite que crímenes así queden en la impunidad durante años. Pero no teman, ciudadanos: el acusado ahora está tras las rejas… al menos hasta que algún juez decida que un “error procesal” o un “habeas corpus creativo” lo libere.

Lo más hilarante (si el término puede usarse en este contexto) es que la fiscalía aún no define si lo acusará formalmente por feminicidio y terrorismo, como si después de cuatro años no hubieran tenido tiempo suficiente para revisar los expedientes. “Será hasta el martes”, anunció LeBarón, demostrando que la justicia mexicana sigue operando con la urgencia de un trámite burocrático para renovar una licencia de conducir.

Mientras tanto, el presunto asesino disfrutará de la prisión preventiva (léase: hotel de lujo con rejas) en el penal del Altiplano, donde seguramente reflexionará profundamente sobre sus actos… o al menos sobre cómo evadir la condena. “Es menos posible que otra mujer sea asesinada”, declaró LeBarón con esperanza, aunque en un país donde cada día se cometen 10 feminicidios, su optimismo suena más a wishful thinking que a realidad.

Por supuesto, las autoridades no han proporcionado detalles sobre la captura (¿acaso esperaban transparencia?), dejando a la ciudadanía preguntándose si esto es un avance genuino o solo otro “logro” mediático para la próxima conferencia mañanera. Lo único claro es que, en el México de la “justicia expedita”, cuatro años y un rosario de víctimas después, al fin alguien mueve un dedo. Qué eficiencia.

Anuncio

Ultimas Publicadas

Anuncio

Lo mas visto del día