México celebra su “autosuficiencia energética” mientras compra crudo en el extranjero

En un acto que mezcla el realismo mágico con la contabilidad creativa, la senadora Olga Sosa declaró hoy que México “avanza hacia la autosuficiencia energética” durante un cóctel —perdón, “foro de liderazgo”— patrocinado por Woodside Energy, empresa australiana que extraerá el 80% de las ganancias del yacimiento Trion.

“Hemos logrado la hazaña geopolítica de vender nuestra soberanía a precio de outlet”, exclamó Sosa frente a un cartel que rezaba “Alianza estratégica” mientras Pemex firmaba su décimoquinto préstamo para importar gasolina. Entre canapés de salmón, se anunció el “histórico” acuerdo: México pone el petróleo, Australia la tecnología, y los ciudadanos la factura.

“Woodside es un ejemplo de cooperación”, dijo la senadora sin mencionar que la empresa evitó $300 millones en impuestos mediante un paraíso fiscal.

El proyecto, presentado como “motor de desarrollo”, incluye tres empleos locales por cada $100 millones invertidos. “Capacitaremos a cadetes en tecnología punta”, prometió Sosa, omitiendo que los manuales estarán en inglés y los puestos directivos los ocuparán expatriados.

Mientras tanto, en el Senado se aprobaron once leyes secundarias para “regular” el sector, incluyendo la polémica Ley de Confusión Energética que permite llamar “autosuficiencia” a importar el 70% del gas y “soberanía” a regalar yacimientos. “El pueblo es nuestra prioridad”, afirmó la legisladora, cuyo vuelo en jet privado al foro fue cubierto con fondos públicos.

Al cierre, los asistentes brindaron con champagne por la “transparencia” del contrato —cuyas cláusulas secretas se guardan en una caja fuerte en las Islas Caimán— y por el “éxito” de un modelo que convierte recursos nacionales en dividendos extranjeros. Mañana, Pemex anunciará otro recorte al subsidio de gas LP mientras Woodside cotiza en bolsa sus ganancias récord.